Marcelo Gallardo fue contundente al hablar sobre el estado físico y futbolístico de Juan Fernando Quintero al llegar a su tercer ciclo en River, tras su salida del América de Cali.
Según el técnico argentino, el volante regresó sin el ritmo necesario para las exigencias del grupo, lo que ha retrasado su debut y generado preocupación en el cuerpo técnico durante la rueda de prensa, Gallardo admitió que “le falta juego, le falta ritmo”, explicando que llega entrenando por su cuenta desde hace un mes, pero aún lejos de la intensidad requerida por el cuerpo técnico. Lea: Hicimos historia juntos”: Jhon Arias deja Fluminense y promete regresar
Este diagnóstico del “Muñeco” revela la gran brecha entre las exigencias futbolísticas de River y el nivel al que estaba Quintero en Colombia.
El principal conflicto, según Gallardo, es que el mediocampista no cumplió con los estándares de entrenamiento en América, donde —afirman— no estaba preparado para sostener la alta exigencia física del fútbol argentino.
Esta situación llevó al entrenador a destacar públicamente el deficiente nivel con el que llegó el colombiano, señalando que este ha “dañado todo” en términos de tiempo y planificación.
Este diagnóstico encendió las alarmas en el entorno de River Plate, ya que el retorno de Quintero ha sido marcado como un fichaje de peso con contrato hasta 2028. Si bien su llegada generó entusiasmo por su condición de ídolo, también existe incertidumbre sobre su capacidad real para adaptarse al ritmo del plantel.
Las dudas de Gallardo
La fuente de estos cuestionamientos, según periodistas argentinos, no es solo el aspecto físico, sino también un tema de compromiso deportivo. Gallardo dejó entrever que Quintero no se encontraba en la misma sintonía que el equipo, por lo que la planificación de su puesta a punto se vuelve un desafío central. Lea: Estos son los convocados para el Skills Challenge del All-Star Game
Este regreso no ha sido una vuelta triunfal. El mensaje de Gallardo ha sido claro: sin entrenamiento intenso y ritmo competitivo, Quintero no estará pronto para debutar. Ahora, el foco está en acelerar su adaptación y corregir ese “lío” que, según el entrenador, ha perjudicado todo el proceso de integración al plantel.