En un emotivo encuentro en el estadio Palmaseca, Jarmein Peña, el sólido defensor del Junior de Barranquilla, no pudo contener las lágrimas antes del partido contra el Deportivo Cali, marcando su regreso a las canchas tras casi un año de ausencia.
La noche del 12 de julio de 2025, en la primera fecha de la Liga BetPlay 2025-II, Peña vivió un momento que conmovió a hinchas y compañeros por igual. Su llanto, captado por las cámaras durante el himno nacional, reflejaba la lucha y el sacrificio de superar una grave lesión de ligamento cruzado sufrida en agosto de 2024, que lo mantuvo alejado del césped por once largos meses. Te invito a leer: Balance de Alfredo Arias sobre el primer partido con Junior de Barranquilla
Jarmein Peña y su lado humano
Peña, conocido por su fortaleza en la zaga, mostró su lado más humano al quebrarse emocionalmente, apoyado por un compañero que lo consoló en ese instante de vulnerabilidad. Su retorno no fue solo un hito personal, sino un símbolo de resiliencia para el equipo dirigido por Alfredo Arias. Al finalizar el partido, que Junior ganó 2-0, Peña cruzó el campo de rodillas, cumpliendo una promesa de gratitud por su recuperación. Este gesto, cargado de simbolismo, resonó en las gradas y en las redes sociales, donde los aficionados elogiaron su entrega. Te invito a leer: Real Cartagena: José Leudo, la fiera que llega con hambre de gloria
El Deportivo Cali, bajo el mando de Alberto Gamero, luchó con un hombre menos tras la expulsión de Fabián Castillo al minuto siete, pero no pudo contrarrestar el ímpetu de Junior. Peña, con su presencia imponente, no solo aportó solidez defensiva, sino que encarnó la pasión y el espíritu de superación. Su llanto y su promesa cumplida dejaron una huella imborrable en la Liga BetPlay, recordándonos que el fútbol es más que un juego: es un escenario de emociones y redenciones.