Carlos Alcaraz firmó este domingo una de las victorias más contundentes de su carrera al superar al número uno del mundo, el italiano Jannik Sinner, y conquistar por primera vez el Masters 1.000 de Roma.

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EFEEl español, que esta semana recuperó el segundo lugar del ranking ATP, se impuso por 7-6(5) y 6-1 en una final donde mostró una versión dominante, especialmente en un segundo set que fue una auténtica exhibición. Lea aquí: El logro que consiguió Jasmine Paoilini tras ganar el Abierto de Italia

En el duelo entre los dos mejores del circuito, Alcaraz volvió a imponer su ley. Con este triunfo suma ya 19 títulos como profesional y encadena cuatro victorias consecutivas frente al italiano, a quien ya había superado en Pekín, Roland Garros e Indian Wells. Además, completa así los cuartos de final en todos los grandes torneos, reafirma su condición de favorito de cara a Roland Garros y suma ya 78 triunfos en torneos Masters 1.000 con apenas 22 años.
Frente a un Foro Itálico volcado con Sinner, Alcaraz no se inmutó. Ni siquiera el hecho de ir siempre por detrás en el primer set lo descentró, una situación que, en realidad, no le incomoda: suele elegir restar cuando gana el sorteo de saque. Su mentalidad competitiva volvió a marcar diferencias.
Sinner, que venía con una racha de 26 victorias seguidas, se topó otra vez con el único rival que parece tenerle tomada la medida. Fue precisamente Alcaraz quien le infligió su última derrota en octubre de 2024, en Pekín. Esta vez, el murciano lo volvió a frenar, sin que pesara el hecho de estar regresando de una lesión ni la presión de jugar ante el público local.

El primer set fue ajustado, con apenas tres oportunidades de rotura: una para Alcaraz que no aprovechó, y dos para Sinner que el español salvó con autoridad. El desenlace llegó en el ‘tie-break’, donde Alcaraz fue más sólido y lo cerró con un punto en la red que celebró con el puño al cielo, consciente de que había golpeado primero. Le puede interesar: Paolini y Errani: una épica remontada para quedarse con el WTA 1000 de Roma
Lo mejor llegó después. En el segundo set, Alcaraz barrió por completo a su rival. Lo asfixió con un tenis agresivo, sin dar tregua, con dos ‘breaks’ consecutivos que le permitieron colocarse 5-0. Sinner, desbordado, evitó el rosco pero no la derrota. El murciano cerró el duelo con su servicio y celebró el título con un abrazo respetuoso hacia su rival.

Roland Garros, el próximo objetivo de los mejores
Roma ya es suya. Alcaraz la conquistó en su primera final en el Foro Itálico, ante su mayor oponente, en la tierra batida que tanto domina. Y ahora, con la confianza al máximo, apunta a su gran objetivo: Roland Garros.