El segundo cuarto del partido entre los Minnesota Timberwolves y los Detroit Pistons se vio empañado por una fuerte pelea que resultó en la expulsión de cinco jugadores y dos miembros de los cuerpos técnicos.
Por el lado de los Timberwolves, Naz Reid, Donte DiVincenzo y el asistente Pablo Prigioni —exjugador del Baskonia, Real Madrid y seleccionador argentino— fueron enviados a los vestuarios. En los Pistons, Isaiah Stewart, Ron Holland II, Marcus Sasser y el entrenador JB Bickerstaff también vieron el resto del encuentro desde fuera.
El altercado estalló cuando restaban 8:36 para el descanso y los Pistons ganaban 39-30. Todo comenzó con una falta de Holland sobre Reid mientras este intentaba encestar. El roce entre ambos encendió los ánimos, y cuando DiVincenzo intervino sujetando la camiseta de Holland, la situación se descontroló. Lea: Preocupación por Michael Schumacher: su salud empeora
Jugadores y entrenadores de ambos equipos se enzarzaron en una trifulca a escasos metros de la primera fila de espectadores, con algunos incluso cayendo sobre ellos. En lugar de calmar los ánimos, Bickerstaff y Prigioni protagonizaron un acalorado enfrentamiento verbal y tuvieron que ser separados.
Récord en faltas técnicas
El partido ya venía tenso, pero este incidente lo llevó al límite. Se pitaron 12 faltas técnicas, la cifra más alta en un juego de la NBA desde el 23 de marzo de 2005, según datos de OptaSTATS.
“Obviamente, las cosas se salieron de control, pero es evidente que los muchachos se cuidan y protegen mutuamente. Esos son valores innegociables en nuestro vestuario”, declaró Bickerstaff tras el encuentro.
Chris Finch, entrenador de los Timberwolves, también dio su punto de vista: “El partido ya estaba siendo demasiado físico. Sabíamos que ellos juegan así, golpean y sujetan. Pero llegó un momento en el que los jugadores tomaron las riendas, y eso nunca es lo ideal”. Le puede interesar: Haaland, investigado por presunta agresión a mascota del Manchester City
A pesar del caos, Minnesota logró imponerse con un marcador aplastante de 123-104, remontando una desventaja de 16 puntos. Las bajas pesaron más en Detroit, que además sufrió la ausencia de su estrella Cade Cunningham, lesionado en la pantorrilla.
Rudy Gobert brilló con 19 puntos y 25 rebotes, 10 de ellos ofensivos. En ataque, Julius Randle (26 puntos) y Anthony Edwards llevaron el peso anotador. Por los Pistons, el mejor fue Malik Beasley, con 27 puntos.