El Real Madrid se impuso al Rayo Vallecano (2-1) en un partido en el que vivió momentos de incertidumbre y recibió silbidos de su afición debido a la falta de control en el juego. Sin embargo, la calidad individual de Kylian Mbappé y Vinícius Junior fue suficiente para asegurar la victoria antes del crucial enfrentamiento del miércoles ante el Atlético de Madrid en la Liga de Campeones.
Además, el triunfo permitió al conjunto blanco arrebatarle el segundo puesto en la Liga al equipo rojiblanco, que cayó ante el Getafe 2-1. Lea: Estos son los convocados por Junior para enfrentar a Millonarios
El encuentro comenzó con un Real Madrid que logró una ventaja rápida pero engañosa gracias a dos goles en apenas cuatro minutos. Primero fue Mbappé quien abrió el marcador tras aprovechar un rebote de Lejeune, y poco después Vinícius aumentó la diferencia en una jugada individual en la que superó a la zaga rival.
A pesar de este inicio favorable, el equipo de Carlo Ancelotti evidenció fragilidad defensiva, en gran parte por las ausencias de Rüdiger y Courtois, lo que permitió al Rayo Vallecano generar peligro.
La zaga merengue mostró imprecisiones desde el arranque, con errores en la salida del balón y falta de contundencia en los despejes. El Rayo aprovechó estos espacios para crecer en el partido y encontrar su oportunidad en la frontal del área. Así llegó el descuento visitante, con un potente disparo de Pedro Díaz que tras impactar en el travesaño botó dentro de la portería, gol que fue validado tras revisión del VAR.
El Real Madrid no podía permitirse un tropiezo en Liga, menos aún en el Santiago Bernabéu y tras conocer la derrota del Atlético de Madrid, que le permitía recuperar la segunda posición. No obstante, el equipo no mostró una actitud dominante y su afición dejó notar su descontento en varios momentos del encuentro.
Ambiente tenso en el Bernabéu
El ambiente tenso llevó a Ancelotti a realizar cambios, introduciendo a Fede Valverde en lugar de Rodrygo Goes en el minuto 68 para reforzar el mediocampo y recuperar el control del juego.
A pesar de los ajustes, el Real Madrid siguió sin encontrar fluidez ofensiva, dependiendo de intentos individuales de sus atacantes. El Rayo Vallecano, aunque sin grandes ocasiones claras, se mantuvo en la pelea y obligó al conjunto blanco a sufrir hasta el final. Vinícius Junior tuvo en sus pies la oportunidad de sentenciar, pero no estuvo acertado en el remate ni en la toma de decisiones finales. Lea: Así va el fútbol colombiano tras el empate del líder Medellín
El pitido final dejó un sabor agridulce en el Santiago Bernabéu. Aunque el Real Madrid consiguió los tres puntos y escaló en la clasificación, el rendimiento del equipo generó dudas de cara a su próximo compromiso en la Liga de Campeones. La falta de solidez defensiva y la dependencia de acciones individuales serán aspectos a mejorar si los blancos quieren competir con garantías ante el Atlético de Madrid en un duelo clave para sus aspiraciones europeas.