En nuestra liga profesional de fútbol se puede decir que hay tres equipos grandes: Nacional, Millonarios y América. Y otros clubes como: Santa fe, Deportivo Cali, Junior, Medellín, Tolima y Once Caldas, los cuales le disputan este honor a los tres primeros, todo esto medido por: número de aficionados, trofeos en sus vitrinas e historia.rido de esta década ninguno de ellos ha ganado un torneo continental, solo la hacen de animadores y hasta ahí. Existen varios motivos que hacen que la liga Dimayor no sea representada con dignidad en el continente.
A lo largo de su historia, el fútbol profesional colombiano ha contado con destacadas participaciones a nivel internacional, desde aquel Millonarios de la época del dorado a principio de los años cincuentas que conto en ese momento con los mejores jugadores del mundo y se paseo por los estadios del planeta maravillando con su exquisito fútbol, pasando por ese América de Cali de los ochentas que disputo tres finales consecutivas de la Copa libertadores, ese Nacional de Francisco Maturana que nos dio nuestro primer título en dicha competición en 1989 y luego repitió en 2016, Once Caldas del profe Montoya que con estrategia y determinación de sus jugadores ganaron la Libertadores de 2004 venciendo a mismísimo Boca Juniors de Carlos Bianchi y sin desmeritar la Copa Sudamericana ganada por Independiente Santa Fe en 2015 mas otros torneos continentales ganados por nuestros clubes entre los años noventas y principios del milenio. ¿pero que es lo que pasa hoy, porque no podemos competir al nivel de otras ligas?. Lea también: Derbi Madrileño en Champions: Real Madrid recibe a Atlético de Madrid
Empecemos hablando del primer problema y para mi el mas grave; los derechos de transmisión de televisión dejan a los equipos de fútbol muchos dividendos y estos se pueden ver reflejados en sus nóminas, en las ligas mas importantes del mundo, cada club es dueño de estos derechos mientras que en nuestro país se reparten de forma equitativa entre los treinta y seis equipos que conforman la Dimayor, si bien esto se hace para que exista un equilibrio entre los clubes mas grandes y los mas chicos, no siempre se da y mas que todo por la corrupción que existe entre los directivos. Si se hicieran las cosas como en otras ligas, si bien se ampliaría aun mas la diferencia de presupuesto que hay entre equipos como Millonarios y Unión Magdalena (por poner un ejemplo) y esto haría menos competitiva la liga Colombia, también es cierto que, con más recursos obtenidos por los derechos de transmisión, estos equipos grandes podrían invertir mas en jugadores de calidad y así hacerles frente a clubes de otras ligas.
Desde que empezó esta década, los torneos continentales casi en su totalidad han sido acaparados por equipos del Brasileirao, para nadie es un secreto que el gigante sudamericano tiene de lejos la economía mas grande de la región y esto se nota en sus competiciones deportivas, ni los equipos argentinos con toda su garra y tradición les han podido hacer frente, a excepción de la Copa Sudamericana ganada por Racing el año anterior. Lea también: Así fue la asistencia de Juanfer Quintero vs Pereira este fin de semana
Antes, para un futbolista profesional, no nacido ni con pasaporte europeo era mas complicado ganarse un puesto en cualquier club de las ligas mas poderosas, pero con la implementación en 1995 de la ley Bosman ahora es más fácil para los futbolistas no europeos ir a jugar allá. Esto genera una gran fuga de talentos que entes de dicha ley no existía.
Como dije anteriormente en este artículo, nuestra liga profesional esta conformada por treinta y seis equipos dividas en dos categorías y con un sistema de descenso que protege a los equipos grandes de bajar, a parte los equipos de la segunda categoría se sienten seguros porque saben que de ahí no caen mas bajo porque no existe una tercera categoría. Para ser mas competitivos primero se debería abolir ese sistema del promedio y que el que menos puntos haga sea el que baje e implementar esa necesaria tercera categoría y porque no, hasta una cuarta categoría.