El fichaje de Jhon Durán por Al Nassr se ha consolidado como uno de los movimientos más llamativos del mercado de fichajes de invierno 2025. El delantero colombiano, que aterrizó en Arabia Saudita tras su traspaso desde el Aston Villa por una cifra que asciende a 77 millones de euros, ha generado gran expectación tanto en el ámbito deportivo como fuera de él.
Con un contrato gigantesco que lo convierte en uno de los futbolistas mejor pagados del planeta, Durán firmó por una cifra inicial de 77 millones de euros, que podría elevarse a 90 millones por el cumplimiento de varios objetivos. Además, su salario anual será de 20 millones de euros, un incremento significativo respecto a lo que percibía en su anterior club. Lea aquí: Bolívar, con mucho talento, sale a darlo todo en Bucaramanga
El acuerdo con Al Nassr también incluye bonos y una cifra adicional de 20 millones por firmar el contrato. Sin embargo, a pesar de las cifras millonarias y la atención mediática, Durán ya se enfrenta a su primer contratiempo en el país saudí.
La confusión con su novia y la ley islámica
Durante su llegada a Arabia Saudita, el joven delantero de 21 años se instaló en Riad para comenzar su nueva etapa profesional. No obstante, una complicación personal ha alterado sus planes. Según el periódico inglés The Sun, Durán ha decidido vivir en Baréin, país vecino a Arabia Saudita, y viajar diariamente más de tres horas para asistir a los entrenamientos con Al Nassr.
Esta decisión ha sido impulsada por una confusión en relación con la ley islámica, que regula la convivencia de parejas no casadas. Te puede interesar: Jhon Jader Durán es recibido como un ‘Dios’ en Al Nassr
La normativa en Arabia Saudita desaconseja que parejas sin vínculo matrimonial vivan juntas, lo que ha generado inquietud en Durán, quien aún no tiene claro si podrá residir con su novia en el país. Las restricciones incluyen la dificultad para alquilar propiedades si no se presenta un certificado de matrimonio, lo que ha influido en la decisión del colombiano.
Un desafío logístico y personal
Para cumplir con sus compromisos futbolísticos, Durán deberá viajar desde Baréin a Riad, lo que implica más de tres horas de vuelo diariamente. Aunque el trayecto es relativamente corto (aproximadamente una hora y 20 minutos por vuelo), el colombiano deberá acostumbrarse a un exigente ritmo de viajes diarios, que se sumarán a la presión de jugar en uno de los clubes más importantes de la liga saudí. Te puede interesar: Real Cartagena: semana de reflexión para Sebastián Viera y sus jugadores
Este tipo de situaciones no son inusuales para jugadores que se trasladan a países con normativas culturales y sociales muy distintas a las de su lugar de origen. Sin embargo, el contexto religioso y las regulaciones locales han generado un desafío inesperado para el colombiano, quien ahora se enfrenta a una rutina física y mentalmente exigente.