Después de tantos años de lucha, sacrificándose día a día, trabajando con mucho entusiasmo y dedicación, el joven cartagenero Miguel Agámez comienza a ver los frutos, en un premio a su entrega y perseverancia a través del tiempo en el deporte de sus mores.
A sus 15 años, actuando en las menores de Barranquilla Fútbol Club, Agámez recibió el llamado para debutar con el equipo profesional en la Primera B. Fue el 22 de julio del presente año, una fecha que nunca olvidará.
Su aparición se dio en el juego de Barranquilla ante Tigres en el estadio Olaya Herrera de Bogotá, en la primera fecha del Torneo de la Primera B. Miguel Agámez, La Máquina cartagenera que le pone el swing al Barranquilla
Al minuto 60, con el juego en contra 1-0, Agámez ingresó y en menos de 20 segundos metió el pase gol a Brandon Carabalí para emparejar las acciones. Esa sería su primera gran bendición.
Luego se vinieron varios juegos con el Barranquilla mostrando su clase para jugar en la zona medular, en donde se desempeña como volante mixto, con buen pie, poderoso remate y gran sacrificio en marca.
Gracias a sus actuaciones con el Barranquilla, Miguel recibió otra recompensa: fue llamado a la selección Colombia que participará en el Suramericano de Fútbol Sub-17 en Santa Cruz, Bolivia.
El debut de la tricolor será este 4 de octubre ante Chile, a las 4 de la tarde, en el estadio Tahuichi.
Migue está feliz. “Poco a poco, paso a paso, de la mano de Dios, todo se puede”, dice. Miguel Ángel Agámez, el crack de 15 años que debutó con pase gol
Con respecto a qué puede esperar la hinchada de la Tricolor, Agámez comenta: “La selección propone un juego de posesión en el medio campo para así pasar luego a la definición”.
Cada minuto que pasa es de suma importancia para este joven, formado en la cantera de Talentos Cartageneros, del reconocido entrenador y formador Henry Calderón. “Estos 10 días que estuve en concentración los entrenamientos fueron fuertes y exigentes, nos preparamos para ser los mejores”, sostiene.
Está lleno de optimismo y de mucha fe. “En lo individual quiero tener un buen rendimiento adentro y afuera de cancha para así poder ayudar a mí país a estar en lo más alto del podio. Es un orgullo vestir los colores de la camiseta de mi patria”.
Miguel Agámez sabe que todo le está pasando rápido, por lo que debe tener los pies en la tierra y seguir trabajando con la misma humildad que lo caracteriza. “Esto apenas está empezando, agradezco a Dios cada uno de los momentos. Aún no he ganado nada, ahora es cuando más duro debo trabajar”, remata.
Bolivia, Colombia, Perú, Chile y Paraguay participarán en este Sudamericano que irá hasta el 20 de octubre.