El partido lo ganaba el conjunto de Efraín Juárez 1-0 con anotación de Andrés Román. Al minuto 53 llegaría el el segundo gol del equipo local, que tras un pase en profundidad de Edwin Cardona, el extremo Mariano Hinestroza definiría con un tiro cruzado ante la salida del portero Santiago Mele. Sin embargo, esto no fue lo que inició todo el problema, sino lo sucedido después.
¿Qué ocurrió?
Posterior a la anotación del segundo gol, Hinestroza se acercó al banderín del tiro de esquina para la celebración, fue ahí cuando simuló con sus manos en la espalda una aleta de tiburón para luego licuarlo y limpiarse con la bandera de Atlético Nacional, siendo esto el detonante para el inicio de los disturbios en la tribuna occidental.
Rápidamente las peleas se trasladaron a más tribunas del estadio, los hinchas de ambos bandos buscaban agredirse principalmente con armas corto punzantes, y a pesar del intento de la policía y el personal de seguridad del estadio, la situación fue difícil de aguantar. La Policía tuvo un altercado al interior de los pasillos del estadio en un intento de contrarrestar las embestidas de los hinchas visitantes.
“Es imposible ver estas escenas, donde la gran mayoría de personas están armadas en un estadio. De verdad es ridículo. Tenemos que trabajar en medidas preventivas que puedan incluir los marcos de detección de metales en los estadios”, afirmó Fernando Jaramillo, presidente de la Dimayor.
Durante la transmisión del partido también se comentó que posterior a la celebración e inicio de los disturbios se dio un intento de robo de trapo perteneciente a la barra brava local. Esta acción hizo que la pelea se intensificara a mayor escala. Al menos fueron más de 20 los heridos tras estos incidentes. Algunos hinchas fueron ingresado a los camerinos del estadio para ser atendidos por la Cruz Roja.
Finalmente, la Dimayor se pronunció sobre lo sucedido mediante un comunicado “La División Mayor del Fútbol Colombiano – DIMAYOR, se permite informar a la opinión pública que debido a los hechos de violencia ocurridos en las tribunas del Estadio Atanasio Girardot, se ha decidido suspender el partido entre Atlético Nacional y Junior FC por falta de garantías. Desde la DIMAYOR rechazamos categóricamente los actos de violencia que empañan la fiesta del fútbol. En los escenarios deportivos de nuestro país debe prevalecer la sana convivencia. Hacemos un llamado a todos los aficionados a que vivamos la fiesta del fútbol en paz”.
Tras el comunicado, ambos clubes buscarán apelar la decisión y conseguir los tres puntos sobre el escritorio.