Un juzgado en España ha sentenciado a un año de prisión en suspenso a un aficionado que profirió insultos racistas contra los futbolistas Vinicius Junior, del Real Madrid, y Samuel Chukwueze, entonces jugador del Villarreal. La decisión judicial fue dada a conocer este jueves por el Real Madrid.
Los incidentes racistas ocurrieron en el estadio del Mallorca durante dos partidos a principios de 2023. El aficionado, desde las gradas, insultó a ambos jugadores de raza negra. Según el comunicado del club, el acusado fue “declarado culpable de dos delitos contra la integridad moral, agravados por motivaciones racistas”, dirigidos primero a Vinicius y, semanas después, a Chukwueze, quien ahora milita en el AC Milan. Lea aquí: Jannik Sinner comienza con victoria su defensa del título en Pekín
Además de la condena de prisión suspendida, el aficionado no podrá acceder a estadios donde se celebren partidos organizados por LaLiga o la Real Federación Española de Fútbol durante los próximos tres años. La sentencia fue suspendida tras el arrepentimiento mostrado por el acusado, quien pidió disculpas a Vinicius a través de una carta y completó un programa de igualdad y no discriminación.
La oficina de prensa de los tribunales de justicia de las Islas Baleares no hizo público el fallo tras una solicitud de The Associated Press.
Vinicius ha sido blanco de insultos racistas en diversas ocasiones desde su llegada al Real Madrid en 2018. Recientemente, el atacante brasileño declaró que España no debería albergar la Copa Mundial de 2030 si no toma medidas significativas contra el racismo en el fútbol. Le puede interesar: John Arias, adiós al sueño de repetir título en Copa Libertadores
Este fallo sigue al de junio, cuando tres aficionados del Valencia fueron condenados a ocho meses de prisión por cánticos racistas dirigidos a Vinicius. Fue la primera sentencia en España por racismo en el fútbol profesional, marcando un precedente en la lucha contra este tipo de comportamiento en los estadios.