Margen de error no hay, tampoco espera. El año se esfuma.
La ilusión de esta hinchada, que ha esperado estoicamente durante más de diez años, se puede apagar definitivamente, si los jugadores no dan el extra para meterse en la semifinal de la Primera B y soñar con ascender a la A. El 2023 debió ser el año, pero los últimos cartuchos están mojados, a menos que haya una reacción sobrenatural. Le puede interesar: ¿Cómo terminó la primera temporada de Messi en el fútbol de Estados Unidos?
Y para ello, Real Cartagena entrenó a todo vapor durante la semana para afrontar el juego de este domingo ante Boca Juniors, a las 6 de la tarde, en el Jaime Morón, en la segunda fecha de los cuadrangulares semifinales del Torneo de la B. Le puede interesar: Framber Valdez, ante la oportunidad de redimirse y llevar a Astros a la Serie Mundial
Después de caer 2-1 de visitante ante Leones, hoy el triunfo debe ser sí o sí. Y el técnico Martín Cardetti y sus dirigidos saben que están obligados a ganar para seguir teniendo una opción seria de avanzar a la final.
La afición cartagenera confía en una reacción positiva del equipo. De eso no hay duda, por eso hoy lo apoyará al máximo.