Sepp Kuss (Jumbo-Visma), aún no se considera ganador de la Vuelta a España y prefiere esperar para cantar victoria, pues aún resta la “clásica” del sábado en la Sierra de Madrid y habrá que seguir cumpliendo en el equipo con el pacto que acordó con sus compañeros antes de la etapa del Angliru. Le pueden interesar: Remco Evenepoel logra el triplete en la Vuelta a España; Sepp Kuss sigue líder
“La Vuelta está cada vez más cerca. Mañana es una etapa más fácil, pero debemos mantenernos concentrados. Y luego, en la etapa 20, será una etapa muy larga y dura. Hemos acabado con la alta montaña, pero quedan días duros”, dijo Kuss. Le puede interesar: Linda Caicedo, nominada al premio The Best de la FIFA
El Jumbo Visma controló la última etapa de montaña de la Vuelta 2023, pero a pesar de ellos aún pasó el americano por algún momento de apuro.
“Estaba algo asustado porque el ritmo de Vingegaard era muy fuerte. Ha trabajado muy bien para mí y hemos corrido con una táctica más defensiva. Es lo que acordamos como equipo, entre los tres, antes de la etapa de l’Angliru, y estábamos todos de acuerdo. Y luego la estrategia que queríamos seguir después de esa etapa”, comentó.
Kuss recordó la vivencia de una experiencia nueva, ya que desde su papel de gregario nunca había asumido el rol de líder.
“Nunca he ganado una grande, y nunca imaginé estar aquí de rojo. No quiero ser impostor, pero cada día creo más en mi y quiero tener el apoyo del equipo”.