
Es un agradecido con la vida. Su carrera deportiva ha estado ligada con el taekwondo, disciplina que le ha permitido salir adelante.
Ha sido campeón nacional en reiteradas ocasiones y se ha colgado dos medallas de oros en los Juegos Nacionales por Bolívar, en recuerdos que lleva guardado en su mente y corazón.
Edwin Aguilar ama lo que se hace, por eso entrena con pasión aún y en tiempos de pandemia. El COVID-19 ha dado un golpe al deporte, pero él sabe que se debe seguir entrenando para estar listos cuando llegue la hora.
“El hecho de no estar entrenando ni compitiendo de manera normal ha sido durísimo. Para uno mejorar cada día toca entrenar y más en un deporte de combate donde se requiere trabajar la técnica y la táctica junto con un oponente”, asegura Edwin, quien a sus 35 años aún sigue mostrando gran calidad en este deporte.
Contó en qué han consistido estos meses de entrenamiento. “No han estado enfocados o dirigidos a alguna competencia la idea es mantener la forma física con trabajos de fuerza, velocidad y resistencia”.
Se considera un privilegiado de la vida, pues su carrera en el taekwondo, su gran pasión, ha sido muy buena.
“Como deportista logré lo que quería en poco tiempo. Mis mejores logros fueron ser bicampeón de Juegos Deportivos Nacionales en 2012 y 2015. Fui el primer deportista de Bolívar en participar y ganar una medalla en uno Juegos Bolivarianos en taekwondo”, asegura.
También tiene grabada en su mente una competencia internacional en especial. “Me hice a dos medallas de bronce en un torneo Panamericano en México, peleando dos días seguidos, haciendo un total de 8 peleas en esos dos días. Son momentos que nunca olvidaré, representar a Bolívar y a Colombia ha sido o mejor”.
En estos momentos, además de competir como deportista, también le seduce meterse más de lleno a entrenar a los más jóvenes.
“Junto con la comisión técnica tomaré un grupo de juveniles para trabajar con ellos. Estoy cursando octavo semestre de educación física y hace muchos años me gusta dar clases. Decidí aportar un poco de lo que aprendí todos estos años de taekwondo a las futuras generaciones. Queremos que Bolívar sea primero en el taekwondo”, recalca.
Está muy motivado, con poco tiempo en la enseñanza comienza a ver frutos. “El año pasado pude tener una deportista en la lista de los que participaron en los Juegos Nacionales. Creo que con lo aportado a mi formación como entrenador de parte del entrenador Raúl se pueden hacer cosas muy buenas con nuestros taekwondistas bolivarenses”.
Está feliz con este nuevo proceso en su vida. “Ahora estamos iniciando con un grupo de juveniles con el fin de perfilar a estos jóvenes a unas justas nacionales y tratar de llevarlos a una selección Colombia”.
Sus metas vuelan alto, muy alto. “Estar entre los mejores entrenadores de Colombia, así como lo logré como deportista. A eso le apunto”.
Siempre vivirá muy agradecido con el taekwondo. “Del deporte sólo tengo palabras de agradecimiento, donde vivo en la actualidad fue gracias al deporte, trabajo gracias al deporte. Todo gira entorno al deporte, yo seguiré metido en esto de por vida”, remata.