Tigres vs. Azulejos (6:07 p. m.); Astros vs. Rays (6:10 p. m.); Rockies vs. Marlins (6:10 p. m.); Cardenales vs. Cerveceros (7:10 p. m.); Angelinos vs. Atléticos (9:07 p. m.); Diamondbacks vs. Dodgers (9:10 p. m.); Gigantes vs. Padres (9:10 p. m.); Medias Rojas vs. Marineros (9:10 p. m.).
Otros resultados de ayer
Medias Blancas 2, Reales 5; Boston 2, Marineros 8; Cardenales 2, Cerveceros 5; Tigres 2, Azulejos 0; Arizona 5, Dodgers 12; Astros 5, Rays 1; Cachorros 12, Rangers 4; Angelinos 0, Atléticos 4.
La familia del béisbol en Colombia y más concretamente en Cartagena aguardaba la esperanza que Julio Teherán tendría uno de sus días más felices de su vida.
Por un lado porque cartagenero con su sexta apertura en días inaugurales en las Grandes Ligas igualaba al salón de la fama Warren Spaham y por el otro que obtuviera su segunda victoria en los ‘open day’.
Pero el decorado fue otro ayer. Teherán igualó el récord de Spaham (1957-1962), pero sumó su segundo revés en estos días especiales en el mejor béisbol del mundo.
Teherán lanzó cinco entradas completas en la derrota de los Bravos de Atlanta 10-4 ante los locales Filis de Filadelfia.
El colombiano de 28 años recibió cuatro hits, incluido un jonrón de Andrew McCutchen, el primer adversario que enfrentó en el mismo primer episodio, quien se la sacó por la barda del jardín central, le anotaron tres carreras, todas limpias, dio bases por bolas y ponchó a siete bateadores. Su efectividad es de 5,40.
La victoria se la acreditó el norteamericano Aaron Nola, quien trabajó durante seis entradas, permitió dos hits, una carrera, dio cinco bases por bolas y ponchó a ocho adversarios.
En los Filis debutó Bryce Harper, quien recibió una gran ovación de los fanáticos.
Toda la ciudad esperaba ansiosamente el primer encuentro de Harper desde que firmó el contrato por 13 temporadas, que fugazmente fue el pacto más alto del béisbol.
Harper se fue de 3-0 con un pasaporte intencional y no pudo conectar un batazo de poder, pero no hubo de qué preocuparse, pues los Filis sumaron carreras a placer.
El Citizens Bank Park lució abarrotado con cerca de 45.000 fanáticos, muchos de los cuales llevaban a la espalda el número 3 de su nuevo jugador favorito. Estaban listos para festejar, incluso horas antes del primer lanzamiento.
Los Bravos y Filis se volverán a enfrentar mañana (sábado) a las 3:05 de la tarde. Esta serie está pactada a tres juegos.
El sucreño Jorge Alfaro se convirtió en el primer colombiano que conecta un jonrón en el día de apertura, pero su esfuerzo no sirvió de nada porque los Marlins perdieron de local ante los Rockies de Colorado 6-3.
El batazo de cuatro esquina de Alfaro se produjo en el noveno inning por todo el jardín derecho ante un envío del lanzador surcoreano Seunghhwan Oh.
Alfaro se fue de 3-1, con una carrera anotada y otra empujada. Su promedio ofensivo es de .333.
El relevista de Bocachica (Bolívar) Tayron Guerrero también debutó ayer en la temporada 2019 en la derrota de Marlins.
Guerrero ingresó en el sexto inning en el rol de preparador. Su labor fue muy buena ya que se enfrentó a tres bateadores y los retiró a todos, además con dos ponches. Su efectividad es de 0,000.
Los Marlins vuelven a enfrentarse hoy, a las 6:10 p. m. a los Rockies.
El cuarto colombiano en Grandes Ligas y que no debuto ayer es José Quintana, quien estará en la ‘lomita de los sustos’ este miércoles 3 de abril con su equipo Cachorros de Chicago ante los Bravos de Atlanta, a las 6:20 p. m.
Quintana tendrá como adversario a Julio Teherán, que hará su segunda salida de la temporada.
Nuevamente los dos mejores lanzadores colombianos del béisbol profesional estarán frente a frente, dando lo mejor de sí para sus respectivas novenas.
De otra parte, Luke Voit despachó un jonrón en el primer episodio, Masahiro Tanaka se apuntó la victoria en su cuarta apertura en un día inaugural y los Yanquis de Nueva York pusieron en marcha su temporada con una victoria 7-2 ante los Orioles de Baltimore.
Voit la sacó para producir tres carreras ante Andrew Cashner (0-1), y Greg Bird añadió un jonrón solitario en el octavo, los primeros grandes batazos de Nueva York al año siguiente tras fijar un récord de 267 en una campaña de 100 victorias.
Por supuesto, eso no alcanzó para alcanzar a los Medias Rojas de Boston, que ganaron 108 juegos y se coronaron campeones de la Serie Mundial.