A las 6:30 de la tarde del domingo 2 de julio, en el emblemático Teatro Adolfo Mejía, tuvo lugar el concierto ‘Sinfonía del Agua’ de la Orquesta Sinfónica de Cartagena. Bajo la dirección de Paola Ávila, los 43 jóvenes talentos que integran la orquesta deleitaron al público asistente con un amplio repertorio de piezas musicales inspiradas en los sonidos de la naturaleza, en especial, del agua. Le puede interesar: Video: Concierto de la Orquesta Sinfónica de Cartagena
Las obras compuestas por J. Strauss, B. Smetana, H. Mancini, P. I. Tchaikovsky, W. Grieg, A. Márquez, J. P. Moncayo y A. Tovar, en homenaje a Lucho Bermúdez, estremecieron a más de uno y quedó demostrado el poder de la música para traspasar corazones. El trabajo de Paola Ávila al frente de la Orquesta Sinfónica de Cartagena apenas comienza y su deseo por trabajar desde la música para la formación integral de estos jóvenes es una de sus grandes apuestas.
A sus 31 años, esta bogotana también es la Directora Musical de la Orquesta Filarmónica de Mujeres, que hace parte de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, y es la directora titular de la Orquesta de la Universidad de Los Andes.
Creció con música. Cuando tenía siete años sus padres la inscribieron en clases de violín, a los 12 años ya tocaba la viola y, a los 15 años, ya tocaba para distintas orquestas infantiles y juveniles. Alternó sus estudios de bachillerato con los de música en la Fundación Universitaria Juan N Corpas. Lea: ¿Quieres presentarte en el Teatro Adolfo Mejía? IPCC abre convocatoria
Obtuvo su maestría en Dirección Orquestal en Peabody Conservatory - Johns Hopkins University, bajo la tutoría de Marin Alsop. Trabajó con los directores Paavo Järvi, Neeme Järvi, Gennady Rozhdestvensky, Cristi Macelaru y Markus Stenz, entre otros. También le apasiona enseñar y se emociona cada que vez que llega a las aulas de clase.
En entrevista con El Universal, Paola Ávila habló de su pasión por la música y de su llegada a la Sinfónica de Cartagena.
Tomaste clases de música desde muy pequeña, pero ¿cómo descubriste tu vocación por este arte?
Antes de los 15 años y durante mucho tiempo yo decía que no iba a estudiar música. Yo pensé en estudiar cualquier cosa menos música. Me veía como abogada o chef, pero fue cuando fui a un concierto del Réquiem de Mozart acá en Bogotá en la universidad Tadeo Lozano que tuve esta revelación y ahí fue cuando dije ‘yo tengo que hacer esto por el resto de mi vida’, en especial, por esa cercanía que tenía con la música sinfónica. Entonces me vi siendo parte de una orquesta y este deseo se transformó y ahora soy directora de una orquesta y en este punto de mi vida no me veo haciendo nada más.
¿Qué es para ti la música?
Sonará un poco romántico, pero la música es mi vida. Lo que la música le ha dado a Paola Ávila no lo puedo expresar con palabras. Y estoy absolutamente convencida que la música nos hace mejores personas, nos hace mejores ciudadanos y nos hace un mejor país. Donde hay una orquesta y donde hay cultura siempre se están sembrando mejores personas. Todo lo que soy se lo debo a la música y no concibo conectarme con la vida de una forma distinta.

¿Consideras que la formación musical es esencial?
Claro, es esencial desde cualquier punto de vista y desde cualquier enfoque también. Cuando un niño o niña aprende música, está desarrollando su potencial creativo, su sensibilidad y sus habilidades cognitivas. Independientemente del fin de esa formación musical, porque no necesariamente se busca la profesionalización, siempre son más las ventajas y ganancias que trae el arte en la vida de los seres humanos.
¿Cómo alternas tu trabajo entre las tres agrupaciones que diriges?, ¿cómo es un día en la vida de Paola Ávila?
Mi rutina es una locura (risas). Tengo que repartir mi tiempo entre las tres agrupaciones que dirijo, sobre todo mi tiempo de estudio que es a lo que más nos dedicamos nosotros los directores, incluso, más que el tiempo que le dedicamos a los ensayos, se nos van muchísimas horas en la preparación del repertorio que vamos a dirigir. Entonces eso es lo que en un comienzo me costaba, porque hay momentos de mucho estrés y de muchos nervios por ciertos conciertos o compromisos que son más importantes que otros. Lea: ¡Es un hecho! La champeta camino a convertirse en Patrimonio Nacional
Intento hacer actividad física en la mañana y dejo un espacio de una hora para estudiar antes de irme a los ensayos. Ensayo con la Orquesta Filarmónica Mujeres en las mañanas, de 10:00 de la mañana hasta la 1:00 de la tarde. Es uno de mis momentos favoritos del día porque es un momento en el que todas aprendemos de todas y el ambiente laboral es tan seguro porque todas lo disfrutamos mucho. En días tristes o difíciles recupero la energía a través de estos ensayos. Luego voy corriendo a la Universidad de los Andes a dar clases, otro momento que también disfruto porque las nuevas generaciones terminan por enseñarte mucho. Luego me enfoco en los ensayos de las otras orquestas y continúo con los estudios. Los fines de semana trato de descansar y tomar un poco de tiempo para mi.

¿Qué planes tienes con la Orquesta Sinfónica de Cartagena?
Con la dirección de la Orquesta Sinfónica de Cartagena busco que Cartagena entienda que esta orquesta es de la ciudad y para la ciudad, que no es lo mismo como sucede en Bogotá donde a veces las orquestas están un poquito más en este mundo elitista y hay como un malentendido de que no es para todos o que es solamente para los que tienen dinero. Son muchos mitos que no convienen y el hecho de que en la Orquesta Sinfónica de Cartagena los integrantes hacen parte de 32 barrios distintos de la ciudad, ya es un mensaje contundente, por eso es que los conciertos son de entrada libre y hemos tenido la fortuna de que siempre tenemos un público maravilloso que se disfruta las presentaciones.
Por otro lado, otra de las metas es brindar a estos jóvenes una formación de la más alta calidad posible, que no tengan que pensar que tienen que venir hasta Bogotá o hasta cualquier otro lugar del país para recibir educación musical de alta calidad, sino que lo pueden hacer viviendo en su amada ciudad, por eso es que siempre llevamos a talleristas invitados que hacen parte de distintas agrupaciones de Colombia con hojas de vida muy destacadas. Estos expertos les brindan ese conocimiento que los va a formar cada vez más y más. Además, son chicos que tienen muchas ganas de aprender y que tienen muchísimo talento, y qué lindo que la orquesta sea ese camino donde ellos puedan hacerlo de forma grupal y personal.
***
Ávila fue la ganadora del Fellowship en Dirección Orquestal con Chicago Sinfonietta durante la temporada 2018-2019. También obtuvo el Conducting Fellow con la Orquesta Sinfónica de Miami y Directora Líder en OrchKids, programa educativo de la Orquesta Sinfónica de Baltimore, USA.