Pedro Blas es un poeta navegante con una memoria ancestral en la que fluye en un mar del tiempo el padre marinero y pescador mordido por tiburones y la memoria de los descendientes de africanos esclavizados en Cartagena que soñaron y forjaron la independencia desde el arrabal de Getsemaní.
Toda su poesía festeja los orígenes y deidades africanos y su arraigo en Cartagena.
Cuando uno escucha su poesía rebelde, percutiva, vibrante y transgresora, palpita el corazón de los tambores y el habla y el ingenio musical del pueblo Caribe que vuelve tambor ceremonial el alfabeto y crea nuevas jitanjáforas que surgen de los labios del corazón y la emoción. Le puede interesar: Jesús Díaz Corpas, el artista cartagenero del bolígrafo que llegó a Japón
Las metáforas de Pedro tienen la sagrada desnudez y honestidad de una ofrenda que como atarraya al infinito se lanza al mar para recordar el espíritu de los muertos. Esas metáforas cuestionan una Cartagena fragmentada por los racismos y las discriminaciones sociales y raciales.
Y alude con aguerrida sensibilidad y convicción las desigualdades, los arribismos, las estratificaciones, y exalta la batalla de las mujeres en los procesos sociales y culturales, y de los artesanos y mulatos en la construcción de una sociedad donde se respeten los derechos civiles, y el derecho a preservar una herencia cultural africana en Cartagena.
La poesía de Pedro Blas Julio Romero ha representado a Colombia en festivales en Cuba, Brasil, y figura en la antología de poesía afrocolombiana del Ministerio de Cultura. Además de impulsador de talleres literarios, Pedro ha sido gestor cultural, una de las cifras humanas promotoras del Cabildo de Getsemaní y de la Fundación Luis Carlos López. También lea: Fallece Jean-François Fogel, periodista y maestro de la Fundación Gabo
El recital homenaje es organizado por el Espacio Cultural, la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad de Cartagena y el Centro de Estudio e Investigaciones Literarias del Caribe, Ceilika.