Nos recuerda Delia Céspedes, la adorable esposa del maestro Felipe Santiago Colorado, que en 1956 donde estaba el Bar Quemada, en la Calle del Landrinal, existía el Alster Café, Y allí solía ir nuestro querido amigo el maestro Colorado, cuyos cien años de su natalicio se cumplieron en los días terribles de la pandemia. Recuerde aquí: ¡A Santiago Colorado, para siempre!
“Allí se sentaba mi Negrito a escribirme en la etapa en que aún no había ido a Camagüey a conocerme, y luego a pedir mi mano a papá”, evoca con nostalgia Delia.
“Cuando nos casamos me llevó otras veces para disfrutar de la guitarra de Sofronín Martínez, con boleros de mi época y mi tierra natal”. En el Alster Café que doce años después sería un bar de ficción para la película Quemada, y luego bar de la bohemia cartagenera.
El Maestro Colorado forma parte de esa memoria cultural de Cartagena y sus estaciones literarias. Creador del Taller Candil en la Universidad de Cartagena. Personaje inolvidable.