Mucha expectativa ha generado la película colombiana Mesa de tareas, que se estrenará el próximo 12 de mayo en las salas de cine. Su directora y guionista, Andrea Rey, realizó este proyecto en el que ha documentado desde el año 2001 el crecimiento de cuatro hermanos. Le puede interesar: Retrasan la película de animación de “Super Mario Bros.” hasta abril de 2023.
“Cuando inicié mis visitas al sector de Altos de Cazucá, me encontraba llena de rabia y dolor por todas las injusticias que observaba, pero compartir con la familia Chavista generó en mí, una extraña discordancia entre alegría y malestar, entre la risa y la preocupación. Al final, paradójicamente, el ser partícipe de sus sueños y fantasías, ha venido dejando por fuera del campo, el conflictivo contexto que los rodea; su esencia, me invitó a ver la vida con mayor alegría, picardía y optimismo”, dijo Andrea Rey.
También explicó que hoy tiene una gran deuda con esta familia que le permitió “entrometerse” en su vida, compartir con ellos, “me hace ver mi entorno de otra manera y comprender la pobreza y la miseria desde el lado de los dolientes, que lejos de llenarse de odio y resentimiento, agradecen y luchan día a día por continuar viviendo”.
Mesa de tareas es un viaje a través del tiempo, con escala en tres momentos de la vida: la infancia, la adolescencia y la adultez de los hermanos Chavista, un viaje que ha sido documentado en video a lo largo de dieciocho años. Cuenta el diario vivir de los cuatro hermanos, quienes vivieron su infancia y adolescencia en Altos de Cazucá, un sector que se encuentra ubicado en la periferia de Bogotá y alberga al mayor número de desplazados del país: aproximadamente 18.000 víctimas del conflicto armado han llegado al sector desde diversas regiones de Colombia.
El registro durante dieciocho años de la cotidianidad de los hermanos, muestra su transformación desde una infancia de juegos y travesuras, a una adolescencia conflictiva, que, gracias a un proceso de resiliencia, les permite en la adultez, adaptarse y afrontar la adversidad con fortaleza y optimismo.
En la actualidad, cada uno de los hermanos vive en un espacio diferente y sus historias transcurren de forma paralela evidenciando un conflicto entre las potencialidades y cualidades humanas, con un contexto hostil que se interpone en la consecución de los sueños, espacio donde salen a flote las verdaderas riquezas del ser humano; valores como el amor, la solidaridad y la unión familiar, se convierten en la fortaleza y en la fortuna de los protagonistas.
Han transcurrido dieciocho años desde la primera grabación y los cuatro “niños” hoy son “adultos” que crían a su manera a sus pequeños hijos, los cuales viven y sueñan como en su momento lo hicieron ellos. Esta es la historia de quienes siguen luchando por cumplir sus sueños, enfrentando las adversidades con humor, coraje y optimismo.
Los protagonistas
Cristian Mateus Chavista tiene 32 años y es el hermano mayor, quien asumió desde muy temprano el papel de padre de sus hermanos.
Leidy Jazmín Mateus Chavista tiene 30 años y fue hasta hace un par de años madre soltera de una niña de siete años. Leidy estudió hasta 5 grado de bachillerato y dejó los estudios porque quedó embarazada de un bebé que murió a los pocos días de nacido.
Maxi Fabián Rincón Chavista es un joven de 27 años que habita en un humilde barrio de Soacha. Su gran sueño de infancia era ser compositor y cantante de rap, sueño que debió abandonar debido a que tuvo que ser práctico y tener una aspiración más ajustada a su realidad. Maxi estudió en el SENA, vive con su esposa y su hija y trabaja en una empresa de construcción como electricista.
Deisy Carolina Rincón Chavista es una joven de 26 años, madre soltera desde los 15 años. Estudió hasta 4 grado de bachillerato, momento en que abandonó los estudios para dedicarse a cuidar a su hijo y hace dos años logró validar su bachillerato, lo cual ha sido uno de los logros más grandes de su vida.

