Dilma Rousseff, expresidenta y economista brasileña, habló sobre el futuro de la izquierda en América Latina. La política arribó a Cartagena para participar de Hay Festival 2020, en un conversatorio con Javier Moreno, director de El País América. Se refirió a la situación de Venezuela, al proceso de paz en Colombia, a la situación de la cárcel de Guantánamo, a la educación y la pobreza. “La izquierda tiene que interesarse por las consecuencias que el neoliberalismo ha impuesto en la sociedad, como reducir el papel del Estado (...) No hay forma de superar la pobreza sin tener una educación de calidad”, sostuvo y agregó: “Cuando se reduce la capacidad de que el Estado se financie a sí mismo, faltará alcantarillado, educación, atención a las mujeres, todo esto es algo que la izquierda tiene que pensar”.
Superar brechas
Rousseff habló sobre el momento que vive la izquierda y los retos que debería superar. “Yo creo que el gran error de la izquierda fue creer que hay un consenso neoliberal al cual te tienes que ceñir, creo que si uno no puede derrotar esta idea no vamos a poder conseguir una alternativa con la que las personas se identifiquen”, afirmó y señaló que hay que “entender que la democracia es herida brutalmente en cuanto crece la desigualdad”.
“Nunca la izquierda hizo política sin considerar la importancia de aquellos que no tienen nada, ser de izquierda es darle importancia a las personas que no tienen nada, lo que sucede en los países desarrollados es que un ejecutivo de las grandes empresas gana casi 300 veces más de lo que gana un trabajador. Si no enderezamos los temas que van a ser más álgidos, que es el tema de la desigualdad, no hay futuro político para nadie”, añadió.
Preservar el medioambiente
También habló de la Amazonía, sosteniendo que no se debe vender la soberanía. “Nosotros somos los que defendemos el tema de la Amazonía, tenemos un compromiso en darnos cuentan que es una cuestión de soberanía nacional. Nadie puede combatir los problemas ambientales con una visión a corto plazo, solo cuando tienes una visión de mediano y largo plazo es cuando vas a tener una tema de inversiones sostenibles”, señaló. Sobre este tema también dijo: “Vender la soberanía del país no es necesario, la Amazonía tiene que preservase. Hay muchísimos minerales en la Amazonía, pero no es necesario explotar esos minerales, es más importante preservar que explotar”.
La situación de América Latina
“Existen otras situaciones, en América Latina era importante la paz en Colombia (...) Para toda América Latina se trataba de tener tal vez al único continente sin guerras”, puntualizó la expresidenta de Brasil, añadiendo que en parte esa paz se logró gracias a Hugo Chávez. “Ahora, el tema de Venezuela, quería recodar aquí que uno de los grandes fundamentadores de la paz en Colombia fue el presidente Chávez, sin él hubiera sido muy difícil lograr la paz acá”, comentó.
De inmediato sentó su posición sobre una posible intervención militar en el vecino país, cuyo gobierno es socialista. “Si tu eres latinoamericano no podrías estar de acuerdo, yo no aceptaría y no apoyaría cualquier intervención militar en Venezuela. Les voy a decir, no me consta que esta intervención sería realizada por tropas americanas, sería hecha a través de tropas latinoamericanas”.
“El Brasil de Bolsonaro fue instado a hacerlo y ellos rechazaron esto porque sabían que sus soldados iban a ser utilizados (...) lo que se discute en el meollo del asunto es el petróleo venezolano, nosotros (Brasil) también vamos a estar en la mira del petróleo. Petrobras se convirtió en la quinta empresa petrolera más grande del mundo”.
“Toda la crítica a la pobreza venezolana, a la falta de luz en Venezuela, se me parece mucho al tipo de guerra de cuata generación”, dijo y, en materia de derecho humanos, criticó que en el mundo aún existan sitios como la base militar de Guantánamo. “Aquí no voy a defender al gobierno de nadie, pero sí voy a decir que estoy en contra de políticas, que permiten que tengas personas en la condición en las que están en la prisión de Guantánamo”.