El asesinato del sacerdote Darío Valencia Uribe sacudió a la Iglesia católica y causó revuelo a nivel nacional luego de conocerse los detalles del crimen tras la confesión que realizó el presunto homicida, quien fue detenido en París, Francia.
Se trata de Julián Cifuentes, quien fue señalado por los delitos de homicidio agravado; fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones; y ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio, delitos imputados por un fiscal.
Un año y medio después del terrible suceso, la Fiscalía informó que un juez envió a la cárcel al responsable de asesinar al sacerdote, de 59 años, en Pereira. Tras el crimen, Cifuentes huyó a Francia antes de ser capturado y extraditado.
Así fue el asesinato del sacerdote Darío Valencia Uribe en Pereira
De acuerdo con información de la agencia Efe, el sacerdote desapareció el 25 de abril de 2024 en Pereira y sus restos fueron hallados 5 meses después, el 20 de septiembre del mismo año en el municipio de Belalcázar, en el vecino departamento de Caldas.
Según la Fiscalía, Cifuentes “se habría encontrado con el sacerdote, subido a su vehículo para concertar el pago (...) por la compra de una camioneta, disparado en varias oportunidades y arrojado el cuerpo en una zona rural de Belalcázar (Caldas) para evitar que fuera localizado por las autoridades”.
La investigación estableció que Cifuentes lo asesinó para no pagarle un vehículo que ambos estaban negociando.
Asimismo, se le atribuye haber llevado el vehículo a un lavadero de carros para intentar eliminar rastros de sangre y otras evidencias.
El 29 de abril de 2024, Cifuentes salió del país hacia Francia, donde fue localizado gracias a una notificación roja de Interpol. Tras varios meses de trámites, fue extraditado y llegó a Bogotá el pasado 20 de noviembre.