Carlos Hernán Rodríguez Becerra, Contralor General de la República, lanzó una alerta ante la crítica situación de abastecimiento de combustibles en Colombia. El ente de control señaló que existe un riesgo inminente de pérdida de autosuficiencia en el país.
Ante este panorama sugirió diseñar políticas estructurales que fortalezcan los ingresos permanentes del Estado sin trasladar de forma recurrente el peso fiscal al precio de los combustibles usados en el territorio Nacional.
La Contraloría recordó que hasta el 2015 se importaba menos del 2% de gasolina y desde entonces la demanda ha excedido la capacidad de producción de Barrancabermeja y Cartagena, lo que lleva a que las importaciones hayan aumentado y hoy sean casi el 20% de la demanda.
Además, según la información de la Contraloría, se está cerca de perder la autosuficiencia del ACPM, pues se está prácticamente consumiendo el 100% del que se produce en el país. Le podría interesar: Gobierno subió el precio de la gasolina y el ACPM, ¿Cuánto?
Déficit en el Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles
Frente al Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC) el contralor señaló falencias en su diseño, ya que ha generado y seguirá generando déficits, dado que no está adecuadamente adaptado para lidiar con la naturaleza propia del mercado de combustibles que puede presentar volatilidades muy altas en períodos cortos.
“Si sumamos todos los déficits generados en este Fondo y descontamos los escasos superávits que se han tenido desde su creación hasta hoy podemos fácilmente superar los $100 billones de pesos, eso es fácilmente 20 reformas tributarias, que estarían mejor invertidos en otros rubros y probablemente no estaríamos con un sombrío panorama fiscal ni necesitaríamos estas reformas con tanta frecuencia”, señaló el contralor.
Según Hernán Rodríguez, los déficits del Fondo de Estabilización se relacionan también una política de exenciones tributarias a los combustibles vendidos en las Zonas de Frontera, lo cual tiene un costo fiscal que asciende a $417 mil millones anuales y genera incentivos para hacer contrabando de ese combustible. Lea también: Petro prometió que gasolina y cerveza no tendrán nuevos impuestos en 2026
“Como hemos visto, los gobiernos de los últimos 20 años utilizan con frecuencia los precios de los combustibles como una válvula de escape de corto plazo para resolver problemas financieros cuyos efectos se pagan en el largo plazo y el gran reto político-económico es encontrar un equilibrio entre la sostenibilidad fiscal y la estabilidad económica y social, evitando recurrir a los combustibles como herramienta coyuntural de ajuste”, concluyó el contralor.
Además, el ente de control también determinó la incidencia del narcotráfico en la demanda de combustibles, pues se estima que entre el 4% y el 12% de la demanda nacional de gasolina podría estar relacionada con actividades ilícitas, generando pérdidas fiscales y mayor dependencia de importaciones.

