En medio de la crisis diplomática entre Colombia y Estados Unidos, el presidente de la República, Gustavo Petro, anunció que presentará ante la ONU una proposición para que cesen los ataques de la Marina estadounidense contra lanchas atribuidas al narcotráfico en el mar Caribe.
“La operación en el Caribe es ilegal según Amnistía Internacional. ¿Qué piensan los Gobiernos del Caribe? ¿Qué piensan sus pueblos? Colombia debe presentar una proposición en Naciones Unidas pidiendo el cese de la agresión al Caribe”, expresó Petro en su cuenta personal de la red social X. Lea: Así reaccionó Petro al ataque de EE.UU., a cuatro lanchas en el Pacífico
Los ataques estadounidenses a lanchas en el Caribe y el Pacífico
Desde que Estados Unidos desplegó sus buques de guerra al mar Caribe y al Pacífico para acabar con el tránsito de droga hacia su país, ya son quince las embarcaciones destruidas por las fuerzas estadounidenses en aguas internacionales –la mitad de ellas en el Pacífico– y las cuales EE. UU. vinculó con actividades de narcotráfico.
Sumado a eso, la semana pasada, el presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró que no descarta ataques a objetivos en tierra en Venezuela y Colombia, siempre relacionados al narcotráfico, y agregó que, de realizar estas maniobras, notificará al Congreso.
Estos ataques profundizan las tensiones entre Washington y los Gobiernos de Colombia y Venezuela, a cuyos presidentes Trump ha acusado de promover el narcotráfico.
Debido a eso, el Gobierno de Estados Unidos incluyó en la lista de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), conocida como ‘Lista Clinton’, al propio Petro, a su esposa Verónica Alcocer, a su hijo Nicolás Petro y al ministro del Interior, Armando Benedetti, por presuntos vínculos con el narcotráfico.

En septiembre, el Pentágono retiró a Colombia —considerado el mayor productor mundial de cocaína— de la lista de países que colaboraron en la lucha antidrogas durante el último año.
Desde entonces, las relaciones entre ambos países, ya marcadas desde enero por desacuerdos en temas como la lucha antidrogas, la migración y la ofensiva israelí en Gaza, se han deteriorado aún más.

