La decisión del Gobierno de Estados Unidos de retirar la certificación a Colombia en la lucha contra el narcotráfico desató una dura crítica del exvicepresidente Germán Vargas Lleras, quien responsabilizó directamente al presidente Gustavo Petro de lo que calificó como un retroceso histórico en la materia.
En una columna publicada en El Tiempo, Vargas Lleras advirtió que la medida internacional refleja un profundo cuestionamiento a la estrategia antidrogas de la actual administración. Para el dirigente político, lo ocurrido no es un hecho aislado, sino la consecuencia de lo que considera errores acumulados en los tres años de gestión.
Según su planteamiento, el presidente Petro “empoderó a los narcos, dejó las zonas cocaleras bajo su control y nunca ha mostrado el menor interés en erradicar ni en combatir la producción de coca”. Lea: Tildan de “inepto y mitómano” a Petro tras reacción a descertificación de EE. UU.
Producción de coca y cifras récord en 2025
El exvicepresidente respaldó sus argumentos en cifras oficiales. Afirmó que los cultivos ilícitos alcanzaron “su máximo histórico, 300.000 hectáreas en 2025 (70 % del total a nivel mundial)”. Agregó que la producción de cocaína “se duplicó hasta alcanzar el récord de 2.900 toneladas en 2025”, lo que, a su juicio, pone en entredicho los resultados de la política impulsada desde la Casa de Nariño.
Otro de los puntos señalados fue el desplome en los programas de erradicación. Vargas Lleras sostuvo que el país pasó de intervenir 68.000 hectáreas en 2022 a apenas 9.400 en 2024. Incluso, advirtió que al cierre de julio del presente año solo se habían eliminado poco más de 3.000 hectáreas, un contraste que describió como alarmante.
Críticas a la “paz total” y al manejo de la seguridad
Más allá de las cifras de cultivos ilícitos, Vargas Lleras también apuntó contra la estrategia de “paz total”, al asegurar que favoreció el fortalecimiento de estructuras criminales en distintas regiones. Señaló que la suspensión de órdenes de captura y la interrupción de procesos de extradición enviaron un mensaje de tolerancia a quienes siguen vinculados con actividades del narcotráfico.
Recordó casos específicos como el de alias H. H. y alias Mocho Olmedo, cuya no extradición —dijo— es muestra de la permisividad con que el Ejecutivo ha conducido sus negociaciones. Incluso insinuó la existencia de un posible “pacto de La Picota” para beneficiar a líderes criminales.

En materia de seguridad interna, el exvicepresidente describió un deterioro en varios indicadores. Aseguró que los secuestros aumentaron en un 102 %, mientras que la extorsión creció más del 40 %. A esto sumó la cifra de más de 130.000 desplazados en 2024 y la situación crítica en el Catatumbo.
El dirigente también cuestionó la reducción en la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas, al sostener que en estos años “ha tenido una reducción considerable en número de efectivos, la cúpula ha sido desmantelada en repetidas ocasiones, y las acciones militares ofensivas han caído en un 40 %”.
Balance de gobierno y perspectivas
En su análisis, Vargas Lleras contrastó la situación actual con el periodo en el que hizo parte del Ejecutivo. Recordó que entre 2010 y 2012 se logró reducir los cultivos a 47.000 hectáreas, utilizando “todos los métodos a nuestro alcance, erradicación forzosa y aspersión”.
Finalmente, el exvicepresidente concluyó que las perspectivas no son alentadoras. Aseguró que “este gobierno no va a corregir el rumbo, su único interés son las elecciones del próximo año y para eso cuenta con sus aliados de los grupos con quienes mantiene abiertos procesos de negociación. Narcotráfico, ‘paz total’ y permanencia del petrismo en el poder son tres caras de la misma realidad”.