El jefe máximo del Ejército de Liberación Nacional (ELN), Antonio García, respondió públicamente a las declaraciones del presidente Gustavo Petro, quien vinculó a esa guerrilla con el asesinato del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay.
Según información de El Tiempo, García negó de forma categórica cualquier responsabilidad en el crimen y sostuvo que el señalamiento del mandatario carece de sustento.
Durante una ceremonia de ascenso de generales de la Policía, el presidente Petro manifestó que “el ELN estaba asesinando colombianos” y que “es probable, no puedo afirmarlo, que sea el autor del asesinato del senador Miguel Uribe Turbay”. Lea: La fuerte declaración de Gustavo Petro sobre la muerte de Miguel Uribe: “fue por dinero”
Sus palabras tuvieron eco inmediato en la cúpula de seguridad, pues el ministro de Defensa, general (r) Pedro Sánchez, afirmó que no se ha descartado ninguna línea de investigación y mencionó como posibles responsables a varias organizaciones armadas vinculadas al narcotráfico.

Entre esas estructuras, Sánchez señaló a la ‘Segunda Marquetalia’, al ELN y a las disidencias de alias ‘Iván Mordisco’. Aunque subrayó que será la Fiscalía la que determine con pruebas quién está detrás del magnicidio, insistió en que se mantienen abiertas todas las hipótesis.
Respuesta del ELN a los señalamientos
Las declaraciones del presidente provocaron la reacción de Antonio García, quien rechazó de manera contundente las versiones que responsabilizan a su organización del asesinato de Uribe Turbay.
“El Eln fue acusado por el presidente Petro de un acto que no cometió”, expresó el jefe insurgente, al recalcar que cuando esa guerrilla ejecuta una acción armada, “tiene el valor de responder por ello”.
En su pronunciamiento, García también cuestionó la forma en que se ha manejado la información en medio del dolor causado por el crimen. “Es deber de un Presidente decir la verdad al país y al mundo, esa que rueda por los pasillos de la inteligencia y los conversaderos de todo tipo”, afirmó, y agregó: “No es fácil hablar de estos hechos en medio de un dolor que se manipula, pero que malintencionadamente se trata de achacar al Eln”.
Otras hipótesis sobre el crimen de Miguel Uribe
El asesinato del senador y precandidato presidencial, sepultado el 13 de agosto, ha generado múltiples teorías desde distintos frentes del Gobierno. El presidente Petro comparó lo sucedido con el caso del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, asesinado en Cartagena en 2022, y sostuvo que la llamada “junta del narcotráfico”, con supuestos nexos en Dubái, podría ser uno de los cerebros detrás del magnicidio, con el objetivo de desestabilizar a su Gobierno.
Desde el Ministerio de Defensa, sin embargo, la mirada se ha dirigido principalmente hacia la ‘Segunda Marquetalia’. En particular, las investigaciones apuntaron a ‘Zarco Aldinever’, mano derecha de alias Iván Márquez, como uno de los posibles determinadores del crimen. De hecho, el abogado Víctor Mosquera, representante de la familia Uribe, ya presentó una denuncia en contra de ese presunto responsable y varios funcionarios han sido citados para aportar pruebas.

Pese a la amplitud de hipótesis, ni el ELN ni la ‘Segunda Marquetalia’ aparecen como los principales sospechosos en la investigación de la Fiscalía. De acuerdo con lo revelado por fuentes judiciales, la línea de investigación más sólida se concentra en las disidencias de ‘Iván Mordisco’.
Alias ‘el Costeño’, capturado por su presunta participación en el crimen, habría integrado uno de los anillos de seguridad de ese cabecilla y su oficina de cobros ya había ejecutado operaciones similares para la estructura disidente.
Debate por los señalamientos públicos
Las constantes hipótesis expresadas por el presidente y altos funcionarios del Gobierno han suscitado críticas en sectores judiciales y políticos. Varios analistas advierten que los señalamientos sin pruebas concretas podrían entorpecer el avance de la investigación que adelanta la Fiscalía y generar confusión en la opinión pública.
Mientras tanto, la familia de Miguel Uribe insiste en que se esclarezca la verdad y que los autores materiales e intelectuales del crimen sean llevados ante la justicia. El proceso continúa bajo la dirección del ente acusador, que hasta ahora mantiene como principal línea la responsabilidad de las disidencias de ‘Iván Mordisco’.