La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) adelantó una serie de inspecciones en establecimientos turísticos de la región Caribe, luego de la tragedia ocurrida el pasado 11 de julio en el hotel Portobelo Convention Center, en San Andrés, donde una familia de Bogotá fue hallada sin vida dentro de una habitación. Aunque el caso continúa bajo investigación, la entidad tomó decisiones inmediatas para prevenir nuevos riesgos en destinos de alta concurrencia.

Lotería de Bogotá: resultados del jueves 2 de octubre de 2025
El UniversalEn un comunicado oficial, la Superindustria aseguró que “la SIC, desde sus labores de inspección, vigilancia y control, contribuye al esclarecimiento técnico de las condiciones que generaron riesgos, y reafirma su compromiso con la protección de la vida”. Lea: Revelan hallazgos de la autopsia a familia que murió en hotel de San Andrés
Las visitas realizadas derivaron en medidas drásticas en Palomino, La Guajira y en la isla de San Andrés, donde los inspectores identificaron fallas graves en las instalaciones eléctricas y de gas de distintos hoteles.
Cierres totales y medidas correctivas tras los hallazgos
En Palomino, la orden de cierre inmediato recayó sobre los hoteles Beach Life Party Hostel y Casa Ibiza by Beach Life Palomino, ambos administrados por la sociedad Villa Delia Palomino Beach.
La decisión fue adoptada tras constatar deficiencias críticas en los sistemas eléctricos: conductores expuestos, problemas en los tableros de distribución y ausencia de iluminación de emergencia en rutas de evacuación, entre otras irregularidades consideradas de alto riesgo.
Incluso, durante las inspecciones, la SIC documentó el caso de un perro que perdió la vida dentro de una de las instalaciones, hecho que reforzó la necesidad de adoptar medidas inmediatas.
En San Andrés, las verificaciones arrojaron preocupantes deficiencias en los sistemas de gas combustible en varios hoteles, entre ellos Decameron Los Delfines, Las Américas y el propio Portobelo Convention Center. A estos se sumó un cierre parcial en el área de cocinas del Hotel Tone Blue.
Los inspectores identificaron ausencia de ventilación adecuada en espacios donde había presencia de monóxido de carbono, conexiones sin tapones de seguridad, uniones sin protección anticorrosiva, tanques de GLP sin anclaje y carencia de avisos preventivos exigidos por la normativa técnica.

Riesgos por fallas en instalaciones de gas y electricidad
Según la Superintendencia, estas condiciones “incrementan de forma significativa el riesgo de explosión, fugas o intoxicaciones”. Por ello, se ordenó a las sociedades propietarias de los establecimientos en San Andrés —Servincluidos Ltda, Tour Vacation Hoteles Azul S.A.S. BIC, Operadora Apartahotel Las Américas Limitada y Hoteles Portobelo Sai S.A.— implementar acciones correctivas inmediatas para que sus instalaciones de gas cumplan con los reglamentos técnicos vigentes.
La entidad advirtió que el incumplimiento de estas disposiciones podría derivar en sanciones de hasta 2.000 salarios mínimos legales vigentes.
Además, reiteró que el estricto cumplimiento de las normas sobre electricidad, iluminación y gas combustible resulta indispensable para proteger la vida de huéspedes, empleados y visitantes. “En memoria de las vidas perdidas y como lección aprendida de esta tragedia, la SIC continuará realizando inspecciones, priorizando las zonas turísticas y los lugares con alto riesgo, para que hechos como los ocurridos no vuelvan a repetirse”, señaló la Superindustria.