En medio del luto por la muerte del senador y precandidato Miguel Uribe, quien fue víctima de un atentado el pasado 7 de junio y falleció esta semana, se desató una fuerte controversia política. El presidente Gustavo Petro cuestionó duramente las declaraciones que el expresidente Álvaro Uribe hizo llegar a la velación, las cuales fueron leídas por el director del Centro Democrático, Gabriel Vallejo.
En su mensaje, el exmandatario afirmó que “(Miguel Uribe) nunca apeló a la combinación de las formas de lucha, a diferencia de algunos miembros de la Unión Patriótica que promovían el secuestro y participaban de órdenes de asesinato, pero se sentían con derecho a imponerse sobre la democracia”. Estas palabras desataron la reacción del jefe de Estado. Lea: Defensa de Uribe presenta apelación contra condena de 12 años
Petro respondió en su cuenta de X señalando: “Álvaro Uribe está lleno de veneno, desconoce el genocidio de la UP y la participación del Estado en él. Incluso, hoy hace 26 años asesinaron a Jaime Garzón por instigación de un asesor de su gobierno, y asigna como responsable al gobierno actual, cuando sabe que los indicios apuntan a los mismos que asesinaron a la UP”.
La Unión Patriótica rechaza las afirmaciones de Uribe
El mandatario recordó además que “después del análisis judicial de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, se condena al Estado por la muerte de más de 6.000 militantes de la UP”, y criticó que “ante un féretro, se burlan otra vez de la justicia. Cometieron un genocidio político, no lo oculten”.
El partido Unión Patriótica también se pronunció, asegurando que los señalamientos de Uribe “constituyen una grave distorsión de la verdad histórica y un intento inaceptable de justificar uno de los episodios más dolorosos de violencia política en Colombia”.
La confrontación entre Petro y Uribe, marcada por acusaciones cruzadas y visiones opuestas sobre la historia reciente del país, vuelve a poner en el centro del debate la violencia que padeció la Unión Patriótica y el reconocimiento judicial del genocidio contra sus militantes.