Gustavo Petro, presidente de la República, solicitó a la embajadora de Colombia en Egipto, Luz Elena Martínez, averiguar cuántos mercenarios colombianos murieron en un avión emiratí que el Ejército sudanés aseguró haber derribado.
“He ordenado a nuestra embajadora en Egipto averiguar cuántos colombianos murieron, se habla sin confirmar de 40. Veremos si logramos el retorno de sus cuerpos”, manifestó el mandatario de los colombianos a través de su cuenta personal de X.
El presidente Petro agregó que: “He solicitado mensaje de urgencia para el proyecto de ley que prohibe el mercenarismo. Es también una trata de hombres convertidos en mercancías para matar”.
Y continuó: “Tanta guerra quisieron dentro de Colombia, que al debilitarse la guerra en el país, la buscan fuera, donde nadie nos ha hecho daño”. Lea: ¿Gobierno Petro, marcado por la inestabilidad? Más de 50 ministros en 3 años
El jefe de Estado insistió en que “son asesinos los ‘patrones’ que mandan jóvenes a matar y a ser muertos por nada. Son espectros de la muerte que aborrecen su juramento a Bolívar”.
Lo que se sabe del derribo del avión con mercenarios colombianos
Según ha informado la televisión oficial sudanesa, el avión fue derribado cuando los mercenarios colombianos se dirigían al aeropuerto de Nyala, capital del estado sudanés de Darfur Sur y bajo control del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
Los medios locales sudaneses indicaron que la aeronave transportaba al menos 40 mercenarios y en el ataque fueron destruidos también cargamentos de armas.
De acuerdo con la versión castrense, el avión fue derribado en el momento del aterrizaje gracias a información de los servicios secretos del Ejército, que habían seguido el vuelo de la aeronave desde su despegue de una base área en el golfo Pérsico, sin precisar su origen. Le puede interesar: Gustavo Petro catalogó a sectores de la oposición de “vende patria”
Es importante precisar que, este ataque se produce solo dos días después de que el Gobierno de Sudán, controlado por la cúpula militar, denunciara la participación de mercenarios de Colombia que luchan con el grupo paramilitar FAR en la guerra en curso en el país africano.
No es la primera denuncia de este tipo por la participación de mercenarios colombianos en otros países donde se libran guerras, ya que, en julio pasado, Rusia también denunció el alto número de mercenarios colombianos en filas de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Proyecto contra reclutamiento de mercenarios
Por esa razón, el Gobierno colombiano radicó en agosto del año pasado un proyecto de ley para evitar el reclutamiento de mercenarios por parte de organizaciones que los llevan a guerras que no tienen nada qué ver con su país, como ocurre con las de Sudán y Ucrania.
La iniciativa busca aprobar la Convención Internacional Contra el Reclutamiento, la Utilización, la Financiación y el Entrenamiento de Mercenarios, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 4 de Diciembre de 1989.
El caso más conocido de este tipo ocurrió durante la madrugada del 7 de julio de 2021 cuando un grupo de mercenarios supuestamente colombianos entraron a la residencia privada del entonces presidente de Haití, Jovenel Moise, en Puerto Príncipe y lo asesinaron.
De acuerdo con las investigaciones, el magnicidio fue cometido por un comando de 26 mercenarios colombianos que irrumpieron de madrugada en la residencia presidencial, sin hallar resistencia por parte de las fuerzas de seguridad que custodiaban la mansión, situada en el sector de Pelerin, en Puerto Príncipe.