El jefe de Despacho del presidente Gustavo Petro, Alfredo Saade, confirmó este jueves, 10 de julio, que ya hay acuerdo con Portugal para la firma del con trato para la expedición de pasaportes en el país.
La noticia se conoció tras un trino publicado por el funcionario a través de la red social de X. “Luego de reuniones técnicas, todo está acordado”, señaló Saade.
A pesar de que se hicieron encuentros durante esta semana para buscar algún acuerdo, por ahora se desconocen los detalles de este proceso de los pasaportes que ha generado tensiones y dudas frente a este cambio de modelo que han intentado lograr tres cancilleres del gobierno Petro sin ningún éxito. Lea: Citas para pasaporte en Colombia: cómo agendar en cada departamento
La férrea intención del presidente Gustavo Petro de sacar de este modelo de pasaportes a Thomas Greg por la imprenta Nacional ha generado problemas administrativos y disciplinarios a quienes han intentado cumplir con este cometido.
Desde el excanciller Álvaro Leyva, que terminó suspendido por la Procuraduría, pasando por Luis Gilberto Murillo quien acercó al gobierno de Portugal al proceso y de Laura Sarabia, quien habría encontrado fallas en el convenio.
La dura carta de la Embajada de Portugal contra Laura Sarabia
Este anunció de Alfredo Saade se da el mismo día que se conoce una carta de la Embajada de Portugal que señala a la excanciller Laura Sarabia como responsable de frenar este acuerdo que se tenía adelantado previamente.
El documento, dado a conocer por W Radio, señala que desde diciembre de 2024 se iniciaron negociaciones con el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia. La intención era formalizar un acuerdo con la Imprenta Nacional Casa da Moeda de Portugal, en colaboración con su homóloga francesa, para garantizar la impresión y personalización de los nuevos pasaportes colombianos bajo un modelo binacional. Le puede interesar: Laura Sarabia y Luis Murillo responden a investigación por pasaportes
El convenio fue aprobado y publicado en el diario oficial el 26 de febrero de 2025. No obstante, la comunicación diplomática advierte que esto ocurrió con un “retraso de dos meses respecto al plan inicialmente previsto”.
El texto subraya que a comienzos de marzo una “delegación de alto nivel de la Imprenta Nacional – Casa da Moeda de Portugal y su homóloga francesa, socia en este proyecto desde su inicio” viajó a Bogotá con el propósito de concretar el acuerdo y poner en marcha las actividades técnicas necesarias.
“Se desplazó a Bogotá para firmar el acuerdo comercial, y subsecuentemente, iniciar los trabajos de configuración de modo que para el 1 de septiembre de 2025 la nueva solución estuviera operativa, es decir, que la personalización pudiera ser asegurada por la Imprenta Nacional de Colombia y la producción de los pasaportes fuera garantizada en Portugal y en Francia por las dos empresas públicas”, precisa el documento.
A pesar de los avances iniciales, las reuniones sostenidas los días 6 y 7 de marzo con el equipo que lideraba Sarabia en la Cancillería marcaron un punto de inflexión. Allí, según la carta, “se les comunicó que existían algunas reservas respecto al modelo diseñado”. Lea también: Procuraduría abre investigación contra Murillo, Sarabia y Saade por pasaportes
El gobierno portugués señala que surgieron cuestionamientos sobre el marco legal que debía adoptarse, en calidad de convenio interadministrativo internacional, y sobre la garantía de los presupuestos requeridos para cubrir el periodo de diez años previsto en el contrato.
Aunque se conformaron dos grupos de trabajo, uno jurídico y otro técnico, estos fueron suspendidos hacia finales de mayo sin que se lograra avanzar. La embajada destaca que la Imprenta Nacional portuguesa ha mantenido una actitud abierta y colaborativa, pero que “solo hemos sido convocados para aclarar dudas” y que “A la fecha, no tenemos conocimiento, ni hemos sido involucrados en discusiones de naturaleza más estratégica”.
Por su parte, la excanciller Laura Sarabia envío un documento a la Procuraduría señalando que esté nuevo modelo de los pasaportes de retraso tres meses por demoras en aprobaciones a cargo de la casa de la moneda de Portugal, lo cual afectó el cronograma que estaba con la Imprenta Nacional.