Con un comunicado y cartel a la opinión pública, la Policía Nacional informó sobre la recompensa de 300 millones de pesos para quien entregue información veraz y oportuna sobre el paradero de alias ‘Chipi’ o ‘Costeño’, señalado de ser pieza clave en el atentado sicarial contra el senador Miguel Uribe Turbay, en Bogotá.
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ColprensaLa institución publicó una fotografía del señalado con su nombre de pila el cuál es Elder José Arteaga e invitó a la comunidad a denunciar para aclarar este hecho violento que ha dejado conmocionado al país. Recordemos que el precandidato a la presidencia sigue en una clínica en estado crítico tras recibir dos balazos en la cabeza el pasado 7 de junio, mientras hacía un evento político.
Según la institución, ‘Costeño’ estaría vinculado a estructuras criminales dedicadas al sicariato y al narcotráfico y su papel en el atentado habría sido el de ser el cerebro o principal dinamizador y coordinador logístico del ataque contra el congresista y precandidato.
¿Quién ordenó el atentado sicarial contra Miguel Uribe?
Según reveló la revista Semana, la orden de asesinar al precandidato presidencial, Miguel Uribe Turbay, habría sido emitida por las disidencias de las Farc, específicamente por el grupo conocido como la Segunda Marquetalia, liderado por Iván Márquez. Lea: ¿Quién ordenó el ataque contra Miguel Uribe? Esto revelan las investigaciones
Esta versión ha sido respaldada por varios testimonios recogidos durante la investigación. Incluso, pro el más reciente, el de Katherine Andrea Martínez, alias ‘Gabriela’, quien fue capturada en Florencia, Caquetá.
Según el medio en mención, ‘Gabriela’ fue detenida justo cuando se preparaba para huir al monte y ponerse bajo la protección de esa estructura guerrillera. “Ahí incluso tomaría cursos en el manejo de drones y para ser francotiradora”, dijo Semana.
Y agregó: “Esta es la principal hipótesis y línea de investigación, aunque también se analiza si la “guerrilla” a la que se refiere Martínez", quien también es llamada con los alias de Andrea o Gabriela, es de la disidencia de Calarcá, otro de los todopoderosos disidentes de las Farc, que tiene su santuario criminal en el Caquetá“.
En un testimonio exclusivo revelado por Semana, Katherine Andrea Martínez contó que el ataque contra Uribe Turbay habría sido ordenado desde la selva y ejecutado en Bogotá por una organización criminal subcontratada, que incluso involucró a un menor de edad con perfil “suicida” para no dejar rastros. Sin embargo, varios de los responsables fueron capturados y han comenzado a confesar buscando beneficios jurídicos y protección.