La vicepresidenta Francia Márquez volvió a cuestionar públicamente al Gobierno de Gustavo Petro, del que forma parte, al señalar que ha sido víctima de exclusión institucional, falta de respaldo presupuestal y actitudes discriminatorias.
Durante un acto público, Márquez lanzó duras acusaciones que reafirman el distanciamiento entre ella y el círculo cercano del Presidente.
“Este es un gobierno que practica el racismo y el patriarcado”, sentenció la Vicepresidenta, en una intervención que encendió nuevamente las alarmas sobre las tensiones internas en la Casa de Nariño. Lea: Francia Márquez se reunió con Armando Benedetti tras meses de tensión
La declaración se suma a una serie de pronunciamientos críticos por parte de Márquez, quien ha denunciado en reiteradas ocasiones los obstáculos que ha enfrentado para desarrollar su gestión.
“No ha sido una tarea fácil gobernar en un país que tiene un Estado racial, con un Gobierno que también practica el racismo y el patriarcado”, sostuvo Márquez, visiblemente frustrada por las condiciones que, según ella, han limitado su ejercicio como segunda al mando del país.
Sin presupuesto ni apoyo institucional
La Vicepresidenta también denunció que su despacho carece de recursos económicos básicos para operar, lo que la ha obligado a depender del apoyo internacional y de alcaldes locales para llevar a cabo actividades oficiales.
“En este Gobierno me ha tocado llegar a los territorios y a veces tocarle las puertas a un alcalde para que financie una reunión de articulación interinstitucional. Entonces ha sido sin garantías económicas, sin presupuestos concretos, asignados a la Vicepresidencia para hacer el trabajo. Lo que he podido lograr lo he hecho en articulación con cooperación internacional que me han apoyado fuertemente”, explicó.
En su intervención, Márquez también expresó su decepción por las limitaciones que ha tenido para cumplir las promesas que inspiraron su candidatura en 2022. “Cuando llegué, llegué con muchas ilusiones de cambios y sueños y esperanzas, pero he tenido muchas trabas y obstáculos para materializar esos sueños y esas esperanzas para mi gente, para mi pueblo y para este país”, afirmó.
Las tensiones entre Márquez y el Gobierno no son nuevas. En febrero pasado, durante un consejo de ministros transmitido por televisión, la Vicepresidenta expresó su molestia por la presencia de figuras como Armando Benedetti en el gabinete, y por lo que consideró un trato irrespetuoso de parte de la canciller Laura Sarabia.
En ese mismo escenario, criticó la entrega simbólica del Ministerio de la Igualdad, sin recursos ni estructura definida. Tres semanas después, el presidente Petro nombró a Carlos Rosero como nuevo titular de esa cartera, desplazando así a Márquez de su construcción.
La violencia que afecta al departamento del Cauca, tierra natal de la Vicepresidenta, ha sido otro motivo de reclamo por parte de ella, quien ha insistido en la falta de acciones efectivas del Gobierno para atender la crisis de seguridad en esa región.