Un nuevo aumento salarial para los congresistas volvió a encender la polémica nacional. Aunque millones de colombianos enfrentan condiciones laborales difíciles y aún esperan reformas estructurales, los legisladores del país tendrán un incremento superior a los 3,3 millones de pesos mensuales, que se aplicará de manera retroactiva desde enero de este año. El ajuste se produce tras el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y los sindicatos del sector público.
El alza, correspondiente al 7 %, fue confirmada el pasado 30 de abril como parte de la negociación colectiva con los trabajadores estatales. Dado que los salarios de senadores y representantes a la Cámara están atados al promedio de incremento que reciben los servidores del Gobierno Central, este ajuste impacta directamente en sus remuneraciones. De esta forma, sus ingresos mensuales pasarán de aproximadamente 48 millones de pesos a superar los 52 millones. Lea: Los 4 proyectos cruciales que se discutirán en el Senado antes del 20 de junio
Además del aumento para 2025, el acuerdo también establece el criterio para el próximo año: el salario de los empleados públicos subirá con base en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) más un 1,9 %, fórmula que también beneficiará automáticamente a los miembros del Congreso.
Aumento salarial provoca rechazo en redes y sectores del Gobierno
La noticia ha generado molestia en redes sociales y en algunos sectores del Gobierno. La superintendenta de Economía Solidaria, María José Navarro, fue una de las primeras en reaccionar públicamente: “Aumentan en más de $3 millones el sueldo a congresistas mientras la bancada opositora le niega el pago de horas extras, nocturnas y dominicales al trabajador de a pie. Luego dicen que es el presidente Petro el que genera odio de clases”, expresó en su cuenta de X. Para ella, “el chiste se cuenta solo”.
También el exsenador Gustavo Bolívar se sumó a las críticas, recordando la desigualdad que persiste en el país y la distancia entre los privilegios de los congresistas y las condiciones de los trabajadores.
“En $3.360.000 se incrementó salario a congresistas que se oponen a horas extras de trabajadores más pobres”, señaló. Y agregó: “su sueldo quedó en $52 millones (37 salarios mínimos), una de las brechas más altas del mundo”. Bolívar también denunció que el proyecto para reducir el salario de los congresistas “está en el puesto 104 del orden del día”.
A pesar de que la reducción del salario congresional ha sido una promesa constante durante las campañas políticas, los proyectos que buscan limitar estos beneficios rara vez avanzan.
Paralelamente, los legisladores continúan disfrutando de una serie de prebendas que, sumadas al aumento, avivan el debate sobre los privilegios en el poder legislativo. Todo esto ocurre mientras se siguen aplazando reformas clave como la laboral, que apenas fue reactivada tras meses de inactividad en el Congreso.