Margie Espinel, una de las madres que denunció los presuntos abusos sexuales cometidos contra varios menores en un hogar infantil de Bogotá, aseguró haber recibido amenazas de muerte tras hacer pública su denuncia.
El caso involucra a un educador que ya enfrenta cargos judiciales, pero hasta el momento solo tres familias han formalizado sus denuncias ante las autoridades.
“Así me toque mover medio mundo, voy a hacer justicia por mi hija”, dijo la mujer.
Los hechos salieron a la luz hace varias semanas, luego de que niños de entre 2 y 3 años manifestaran a sus padres comportamientos irregulares por parte de un trabajador del Hogar Infantil Canadá, en la localidad de San Cristóbal, adscrito al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Lea: Abuso infantil en el ICBF: las fallas que habrían facilitado el crimen
Freddy Arley Castellanos, de 36 años, fue capturado y es procesado por los delitos de acto abusivo y acceso carnal con menor de 14 años, en ambos casos con agravantes.
Espinel, madre de una de las presuntas víctimas, denunció a través de su cuenta de TikTok que ha sido víctima de hostigamientos por haber hablado públicamente del caso. “Se están haciendo virales unos mensajes que alguien sin escrúpulos ha sacado en contra mía. Yo no digo a qué me dedico porque no estoy buscando un reconocimiento. Yo soy modelo webcam. Mi trabajo no me avergüenza porque es como cualquier otro”, expresó en un video publicado.
@margiieespiinel 🤍 SOLO QUEREMOS JUSTICIA POR NUESTROS NIÑOS Y NUESTRAS VOCES NO SE VAN A CALLAR 👊🏻🤍🌈#justicia ♬ sonido original - Margiie 🖤🦋
Señalamientos contra personal del jardín y reclamos por omisión
La mujer también cuestionó el hecho de que se quiera desviar el foco del caso con ataques personales: “Mi hija tiene a su papá y a su mamá. No convivimos, pero llevamos una muy buena relación los cuatro. Entonces, no entiendo por qué quieren cambiar la versión. Sí son 10 víctimas, no es una víctima, ni tres... ya van 10 víctimas confirmadas. A mí lo que me interesa es que se haga justicia por mi hija que fue víctima de ese señor (Freddy) y por los demás niños”.
Espinel fue enfática en señalar que el presunto abusador no habría actuado solo y responsabilizó al personal del jardín por omisión. “Ninguna mamá se ha referido a plata. Acá lo que nosotros queremos es que todo el peso de la ley caiga sobre Freddy Castellanos y sobre sus cómplices: la coordinadora y las profesoras. Todas ellas fueron cómplices, porque cómo es posible que un niño llore, grite de dolor pidiendo ayuda y nadie lo acompañe. Cómo es que un profesor tenga qué llevar a un niño al baño, ¿dónde estaba la auxiliar y el control de Bienestar Familiar? Aquí hay negligencia y complicidad”.
Aunque el caso ya es conocido por el ICBF y ha iniciado un proceso judicial, la mujer expresó que teme por su seguridad, pero que no se va a rendir. “Yo tengo argumentos sólidos. A mí no me van a venir a tachar como una mala mamá cuando sé y tengo conciencia de que doy todo y me desboco por mis hijos. Así me toque mover medio mundo para que se haga justicia por ellos... pues lo voy a hacer”.