En el corazón de la Ciénaga Grande de Santa Marta, entre canales naturales y manglares infinitos, flota un pueblo que desafía las convenciones: Nueva Venecia. Este pequeño corregimiento del municipio de Sitionuevo, en el departamento del Magdalena, es un asentamiento palafítico donde las calles no se caminan, se navegan; donde los taxis son canoas de motor y las bicicletas no tienen sentido.
Este lugar, muchas veces desconocido incluso por los propios colombianos, guarda una belleza serena y una historia que conmueve. Sus casas de colores pastel reposan sobre pilotes de madera; su iglesia, su cancha de fútbol y su escuela también flotan. Quien llega por primera vez no puede evitar preguntarse: ¿cómo es posible vivir así? Y es precisamente esa pregunta la que vuelve irresistible el lugar. Lee también: Parques naturales de Colombia: descubre los 5 tesoros ecológicos que no te puedes perder.
Cómo llegar a Nueva Venecia, Magdalena
Llegar a Nueva Venecia ya es, por sí solo, una aventura. Desde Santa Marta, el viaje terrestre hasta el corregimiento de Tasajera toma aproximadamente una hora. Allí se aborda una lancha que atraviesa la Ciénaga Grande durante unos 45 minutos. No hay puentes ni carreteras que conecten con el pueblo: el único acceso es acuático.
Durante el trayecto, los visitantes se sumergen en un paisaje de espejos líquidos y cielo abierto, donde garzas, pelícanos y otras aves sobrevuelan los manglares y bancos de peces saltan junto a la embarcación. Es un anticipo perfecto de la experiencia que espera al otro lado: un pueblo suspendido sobre el agua, en medio de una de las reservas más importantes de humedales del país.

Una vida sobre pilotes
Lo que para muchos parece una rareza, para los habitantes de Nueva Venecia es la cotidianidad. La comunidad formada por alrededor de 4.000 personas que han aprendido a vivir, trabajar y celebrar sobre el agua. La pesca artesanal es su principal fuente de sustento y las canoas funcionan como medio de transporte, mercado, escuela móvil e incluso como espacio para socializar.
Las casas, las cuales se construyen con madera resistente a la humedad, y se sostienen sobre pilares que se entierran en el fondo lodoso de la ciénaga. Alrededor de ellas, en lugar de calles o aceras, hay canales por donde niños van al colegio remando, mujeres se saludan de casa en casa y los pescadores regresan con sus redes llenas.
Qué ver en Nueva Venecia
Más allá del asombro visual, Nueva Venecia tiene lugares que contar y mostrar:
La iglesia flotante: construida sobre pilotes, es símbolo de espiritualidad y punto de encuentro para esta comunidad.
- La cancha de fútbol sobre el agua: un ícono del pueblo y reflejo de su espíritu alegre, donde los niños practican dominadas con el agua bajo sus pies. Esta cancha fue financiada por el jugador de fútbol colombiano Radamel Falcao.
La Casa Museo Comunitaria: una parada obligada para entender la historia de Nueva Venecia, marcada por la resistencia y la memoria, en especial tras la masacre del año 2000. Fotografías, relatos y objetos preservan el legado de quienes han vivido la transformación del pueblo.
El arte popular: muchas viviendas están adornadas con pinturas que representan la vida cotidiana, los animales de la ciénaga y escenas de pesca, lo que convierte el recorrido en una galería flotante.
Aventura y naturaleza en la ciénaga
La Ciénaga Grande no solo es el hogar de Nueva Venecia, también es uno de los ecosistemas más biodiversos del Caribe colombiano. El avistamiento de aves es una de las actividades favoritas para los turistas. Se pueden observar garzas, ibis, martinetes, espátulas rosadas y muchas otras especies, especialmente al amanecer o al atardecer.
Además, algunos tours ofrecen la posibilidad de adentrarse en los manglares en pequeñas embarcaciones, acompañados por guías locales que explican la riqueza del ecosistema y su importancia para la regulación ambiental en la región.
Sabores del agua: la gastronomía de este pueblo
Como era de esperarse, la comida en Nueva Venecia gira en torno a lo que ofrece la ciénaga. Los visitantes pueden disfrutar de pescados frescos como mojarra, lebranche o bagre, preparados a la plancha o en sancocho, acompañados de arroz con coco, yuca o patacones.
Muchos habitantes ofrecen almuerzos típicos en sus hogares como parte del turismo comunitario. Además, no faltan los dulces artesanales de coco, los jugos de frutas naturales y el café preparado en fogones de leña sobre plataformas flotantes. Lee también: 5 destinos imperdibles para volar en parapente en Colombia.

Consejos para visitar Nueva Venecia
1. Lleva ropa cómoda y fresca, protector solar, sombrero y repelente contra insectos.
2. Respeta las normas del entorno, no arrojes basura a la ciénaga y sigue las indicaciones de los guías.
3. Apoya el turismo responsable, contrata servicios directamente con habitantes del pueblo o agencias que trabajen con enfoque comunitario.
4. No olvides llevar efectivo, ya que no hay cajeros automáticos ni bancos.
