Aunque resulte engorroso y, en ocasiones, muy costoso llevar al día el mantenimiento de tu moto deber ser una responsabilidad ineludible, pues hacerlo no solo te evitará sanciones con la autoridad de tránsito sino que podría salvarte la vida, ya que hay menos probabilidad de fallas mecánicas y el vehículo responderá de manera efectiva ante situaciones imprevistas en la vía.
En 2023 se registraron más de 7.000 muertes en accidentes de tránsito en Colombia, en la mayoría de estas estuvieron involucradas motocicletas y aproximadamente el 20% estuvieron relacionadas con fallas mecánicas, como sistemas de frenos o neumáticos en mal estado, de acuerdo con información de Fasecolda.
Estadísticas similares se presentan en Cartagena, pues el Departamento de Tránsito y Transporte informó que en lo corrido de este 2025 se han registrado 323 accidentes de tránsito, siendo la motocicleta el vehículo con más incidencia en los casos reportados (85%). Lea también: Accidentes en Cartagena: Motociclistas lideran estadísticas de 2025.
“El alto número de sanciones a motociclistas confirma la necesidad de seguir fortaleciendo las estrategias para este grupo, ya que siguen siendo los principales involucrados en infracciones de tránsito y siniestros viales”, indicó el DATT en un comunicado.
Piezas de la moto que requieren revisión y cambio periódico
Realizar mantenimientos periódicos y cumplir con la Revisión Técnico-Mecánica (RTM) son prácticas esenciales para garantizar la seguridad en las vías, prevenir accidentes relacionados con fallas mecánicas y hasta alargar la vida útil de las motocicletas. Le puede interesar: 7 tipos de motos: elige cuál es la ideal para ti.
Si tienes dudas sobre cuáles con las partes a las que debes prestar atención para hacer el mantenimiento periódico o reemplazarla, te mostramos cuáles son las más expuestas a los daños propios del rodamiento:
- Neumáticos: están en contacto constante con la superficie de la carretera, lo que provoca un desgaste progresivo. Es esencial revisar regularmente la profundidad del dibujo y la presión para garantizar una adherencia y seguridad óptimas.
Revisión o cambio: su reemplazo suele ser necesario cada 10 mil a 20 mil kilómetros, dependiendo del uso y tipo de neumático.
- Pastillas y discos de freno: el uso frecuente del sistema de frenado genera desgaste en estas piezas. Una inspección periódica y el reemplazo oportuno son cruciales para mantener la eficacia del frenado y la seguridad del conductor y su acompañante.
Revisión o cambio: se recomienda inspeccionarlas cada 5 mil kilómetros y reemplazarlas al superar los 10 mil - 15 mil kilómetros, según el desgaste.
Cadena de transmisión: sujeta a tensión y fricción constantes, la cadena puede estirarse o deteriorarse con el tiempo. Lubricarla adecuadamente y ajustar su tensión según las especificaciones del fabricante ayuda a prolongar su vida útil y prevenir fallos.
Revisión o cambio: el reemplazo suele ser necesario cada 20 mil – 30 mil kilómetros.

Filtros de aire y aceite: Estos componentes atrapan impurezas que podrían dañar el motor. Sustituirlos según el intervalo recomendado por el fabricante asegura un rendimiento óptimo y una mayor longevidad del motor.
Revisión o cambio: se sugiere cambiar el filtro de aire cada 10 mil – 15 mil kilómetros y el filtro de aceite con cada cambio de aceite, aproximadamente, cada 5 mil - 7.000 kilómetros.
Bujías: Esenciales para la combustión, las bujías pueden desgastarse o ensuciarse, afectando el rendimiento del motor. Reemplazarlas según las indicaciones del fabricante garantiza una ignición eficiente y un funcionamiento suave del motor.
Revisión o cambio: debes revisarlas cada 5 mil kilómetros y reemplazarlas cada 10 mil – 20 mil kilómetros, según el tipo de bujía.
Batería: Con el tiempo, la capacidad de la batería disminuye, especialmente si la motocicleta no se utiliza regularmente. Verificar su estado y reemplazarla cuando sea necesario evita inconvenientes al arrancar el vehículo.
Revisión o cambio: es aconsejable revisar el voltaje cada 6 meses y reemplazarla cada 2 a 4 años.
Amortiguadores: Estos componentes absorben las irregularidades del terreno. Con el uso, pueden perder eficacia, afectando la estabilidad y comodidad durante la conducción. Es recomendable inspeccionarlos y reemplazarlos si presentan fugas o pérdida de rendimiento.
Revisión o cambio: es necesario inspeccionarlos cada 10 mil kilómetros y reemplazarlos si presentan fugas de aceite, pérdida de rendimiento o después de 40 mil kilómetros de uso intensivo.
Sistema de escape: Expuesto a altas temperaturas y posibles corrosiones, el sistema de escape puede deteriorarse. Revisar periódicamente su estado y realizar los cambios necesarios contribuye a mantener el rendimiento del motor y cumplir con las normativas de emisiones.
Revisión o cambio: lo ideal es revisarlo cada 10 mil kilómetros y realizar el reemplazo en caso de daños visibles o pérdida de eficiencia.