El Tribunal de Apelación de Oporto, en Portugal, dio luz verde a la extradición de Diego Marín Buitrago, conocido como “Papá Pitufo”, a Colombia, donde es señalado de encabezar una red criminal dedicada al contrabando y la corrupción. La decisión judicial representa un avance en el proceso que las autoridades colombianas han impulsado contra Marín, quien fue detenido en diciembre de 2024.
De acuerdo con la investigación, la organización dirigida por Marín habría operado entre septiembre de 2023 y marzo de 2024, enfocándose en el contrabando de mercancías como tabacos y textiles a través de puertos estratégicos en Colombia. Los reportes indican que este entramado delictivo contó con la complicidad de funcionarios públicos que habrían recibido sobornos para facilitar el ingreso ilegal de los productos. Lea: Caso ‘Papá Pitufo’: allanamiento en su mansión reveló nuevas pruebas
Durante su proceso en Portugal, Marín se opuso a la extradición y argumentó que no renunciaría a su derecho de acogerse a la regla de especialidad, mecanismo que le permitiría evitar nuevos cargos en Colombia tras su entrega. No obstante, el tribunal portugués falló en favor de la solicitud colombiana, dando paso a su traslado.
Así ha sido la cooperación judicial entre Portugal y Colombia
El fallo se produjo tras una exhaustiva revisión del caso por parte de las autoridades portuguesas, quienes concluyeron que la solicitud de extradición cumplía con los requisitos legales. El Ministerio de Justicia de Portugal respaldó la decisión, resaltando el carácter penal de las acusaciones y la cooperación judicial entre ambos países en la lucha contra el crimen transnacional.

Si bien la autorización de extradición ya fue concedida, aún queda pendiente la resolución de una solicitud de asilo presentada por Marín ante las autoridades portuguesas. La ministra de Justicia de Colombia, Ángela María Buitrago, explicó que el traslado del acusado podría tardar entre 80 y 100 días, periodo en el cual la Fiscalía deberá esperar para avanzar en su proceso judicial. Marín enfrenta cargos por lavado de activos, concierto para delinquir, corrupción y contrabando.
Estas son algunas de las implicaciones políticas y controversia en el caso
El caso ha generado un fuerte revuelo político en Colombia, pues el nombre de Marín apareció vinculado a la campaña presidencial de Gustavo Petro. Según se ha informado, el acusado habría realizado un aporte económico a la candidatura, el cual posteriormente fue devuelto. Al respecto, el presidente Petro aseguró que no tenía conocimiento del origen de los fondos y que, al enterarse, ordenó su devolución y dejó constancia en un video.
La controversia se intensificó durante un consejo de ministros transmitido en vivo, cuando Augusto Rodríguez, exdirector de la Unidad Nacional de Protección (UNP), acusó a Armando Benedetti, entonces ministro del Interior, de haberse reunido con Marín. Este señalamiento avivó el debate sobre los posibles vínculos entre figuras del gobierno y el acusado.
Con la decisión del Tribunal de Oporto, la extradición de Diego Marín Buitrago queda en manos de los procedimientos finales de ambos países. Mientras tanto, las autoridades colombianas esperan su llegada para avanzar en el proceso judicial que lo involucra en una de las redes de contrabando más relevantes de los últimos años.