El presidente de Colombia, Gustavo Petro, solicitó este viernes que se levanten los bloqueos impuestos a Venezuela, mientras reafirmó su posición de mantener el diálogo político como herramienta para la resolución de la crisis en el país vecino.
A través de un mensaje en su cuenta de X, Petro expresó que los bloqueos económicos que enfrenta Venezuela están afectando la libre expresión y el desarrollo de procesos electorales en el país. “Si las elecciones de Venezuela no fueron libres, al realizarse bajo el bloqueo económico que se convierte en una extorsión explícita, es importante mantener la tesis del diálogo político más amplio posible en Venezuela, el levantamiento integral del bloqueo y una nueva posibilidad de expresión libre del pueblo de Venezuela”, manifestó el mandatario colombiano.
Petro, quien no participó en la investidura de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela para el periodo 2025-2031, ha cuestionado la legitimidad de las elecciones venezolanas celebradas en julio de 2024. En diversas ocasiones, el presidente colombiano ha señalado que estos comicios no fueron justos debido a diferentes factores, por lo que Colombia no las puede reconocer. Lea: Moción de censura contra Luis Gilberto Murillo por respaldo a Venezuela
A pesar de las diferencias políticas, Petro ha insistido en que su gobierno no romperá relaciones diplomáticas con Venezuela y sigue apostando por el diálogo como mecanismo de solución. Esta postura se mantiene a pesar de las tensiones originadas por la reciente controversia electoral en el país vecino.
Por su parte, el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, y el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, viajaron este viernes a la ciudad de Cúcuta, en el departamento de Norte de Santander, para monitorear la situación en la frontera con Venezuela.
La visita se dio en medio del cierre temporal de la frontera por 72 horas decretado por el gobierno venezolano. Ambos funcionarios realizaron un consejo de gobierno como parte de las medidas adoptadas por el presidente Petro para asegurar la paz y la estabilidad regional.
El cierre de la frontera se produce en un contexto de tensiones entre los dos países, que comparten una frontera de 2.219 kilómetros, en la que habitan aproximadamente 12 millones de personas. Durante su visita, los ministros colombianos se enfocaron en tomar acciones que ayuden a garantizar la estabilidad y la seguridad en la zona fronteriza.