Este miércoles 8 de enero, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó que no asistirá a la posesión de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, acto programado para el 10 de enero en Caracas. Sin embargo, el país estará presente representado por el embajador colombiano en Venezuela, Milton Rengifo, quien participará en el evento por decisión del mandatario y del canciller Luis Gilberto Murillo.
A través de un mensaje en su cuenta oficial de X, antes Twitter, el presidente Petro justificó su ausencia señalando irregularidades en las elecciones del pasado 28 de julio y detenciones arbitrarias de líderes de derechos humanos en el vecino país. “Las elecciones pasadas en Venezuela no fueron libres. No hay elecciones libres bajo bloqueos”, expresó Petro en su publicación.
Además, mencionó que las solicitudes de Colombia para garantizar transparencia electoral no fueron atendidas, pese a haberse planteado en diversos encuentros políticos internacionales. “Expusimos esta posibilidad en Europa, en Venezuela y en los Estados Unidos, sin resultados”, agregó. Le puede interesar: Petro no asistirá a la posesión de Maduro: estas son sus razones
A pesar de las críticas al proceso electoral y a la gestión del régimen venezolano, el presidente reiteró que Colombia mantendrá relaciones diplomáticas con Venezuela, destacando que no intervendrá en los asuntos internos de ese país a menos que exista una invitación formal.
Milton Rengifo, el embajador colombiano en Venezuela, se reunió con representantes de la Cancillería en Bogotá para recibir instrucciones antes de regresar a Caracas y cumplir con su papel en la ceremonia.
Petro subrayó la importancia de la relación entre ambas naciones, señalando que están unidas por lazos históricos, culturales y fronterizos. “Cualquier desavenencia entre los gobiernos no debe serlo entre nuestros pueblos”, enfatizó el mandatario. Lea también: Juan Manuel Santos le pidió a Petro retirar a un embajador: ¿quién es?
El mensaje del presidente también fue interpretado como un llamado a fortalecer las relaciones bilaterales desde el respeto mutuo, aunque dejó claro que no legitimará los resultados de un proceso electoral que considera irregular.