Supersalud rechazó el retiro voluntario de la EPS Sura, luego de que el pasado 28 de mayo extendiera la solicitud a la entidad de comenzar un proceso de desmonte progresivo.
De acuerdo con el diaro El Tiempo, la Supersalud señaló que de aceptar la solicitud, el sistema correría riesgo durante el proceso de recepción y transferencia de los 5,4 millones de usuarios que pertenecen a dicha EPS.
La decisión se tomó en conjunto con la aseguradora, según la entidad, y se establecieron una serie de compromisos para “garantizar la continuidad en la prestación de servicios y el derecho fundamental a la salud” de sus afiliados.
La Supersalud aseguró en su comunicado oficial que “mantendrá un monitoreo estricto y permanente del cumplimiento de cada uno de los acuerdos, con el objetivo de velar por un acceso oportuno y digno a los servicios de salud, garantizando que la EPS cumpla con su responsabilidad a través de su red de atención médica y especializada”.
La EPS Sura continuará prestando sus servicios a la ciudadanía y, según la entidad gubernamental, deberá “fortalecer sus operaciones para garantizar su sostenibilidad y eficacia dentro del sistema de salud”.
¿Por qué Supersalud rechazó la solicitud de Sura?
Giovanny Rubiano, director de Supersalud, habló en una rueda de prensa sobre su intención de mantener en el sistema de salud a Sura y Compensar, para garantizar el derecho a la salud de los más de 7 millones de usuarios que están afiliados a estas dos EPS.
De acuerdo con El Tiempo, la decisión de la entidad estaría relacionada con la reforma a la salud que propone el Gobierno, ya que para su implementación es “necesario mantener en operación a las tres EPS más grandes de Colombia”, que son Nueva EPS, Sanitas y Sura.
Estas entidades cumplen un papel fundamental en el proyecto de ley del Estado, debido a la labor que realizan como Gestoras de Salud, en la transición de usuarios a los Centros de Atención Primaria (CAPS), explicaron expertos a El Tiempo.