La reciente intervención del presidente Gustavo Petro durante el Congreso de la Cámara Colombiana de la Infraestructura generó preocupación en los sectores empresariales, quienes aseguran que, si bien las inversiones estatales han enfrentado obstáculos, el sector privado ha mantenido un nivel constante de ejecución. No obstante, critican que el Estado no ha priorizado proyectos clave en áreas fundamentales como el abastecimiento de agua y la infraestructura de salud, según información de Colprensa.
Jonathan Malagón, presidente de Asobancaria, subrayó la necesidad de garantizar la seguridad jurídica en Colombia para fomentar un flujo de inversiones más ágil y eficaz, particularmente en el sector financiero. “Si algo puede asustar al que financia, al que sirve de garantías y al que lo reasegura, es precisamente la no certeza de recibir esos recursos. Yo creo que en momentos de complejidad fiscal, tenemos que pensar todos los instrumentos que nos permitan concurrir en recursos”, indicó Malagón.
El líder gremial también advirtió sobre el alto costo de oportunidad asociado con recursos no ejecutados, mencionando específicamente los fondos de regalías. “El costo de oportunidad de recursos sin ejecutar en cuentas como los de regalías es muy alto, e infraestructura es uno de los destinos naturales”, añadió. Lea: ¿Qué dijo Gustavo Petro en el XXI Congreso Nacional de Infraestructura?

Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), señaló que los empresarios están particularmente preocupados por la baja inversión en infraestructura, un área que, según él, es crucial para dinamizar la economía nacional. “En este momento la cifra es significativamente más grave que la que teníamos en el pasado. Los niveles de inversión actuales no producirán el desarrollo necesario”, expresó Mac Master, quien también subrayó que el país carece de infraestructura que permita una conectividad adecuada entre regiones y, por ende, la presencia del Estado.
Colprensa mencionó que, a pesar de las preocupaciones sobre infraestructura, el sector financiero ha reportado un repunte en los desembolsos de crédito, especialmente en sectores como la manufactura, agricultura y turismo, lo que se interpreta como una señal de reactivación económica. Según Malagón, en el último mes los desembolsos de crédito experimentaron un aumento anual de 26%, lo que representa un crecimiento robusto en términos reales, independientemente de la inflación.
Por su parte, Ana Milena López, presidenta de Corficolombiana, alertó sobre la caída del ahorro nacional, un fenómeno que ha afectado directamente el Producto Interno Bruto (PIB). “El ahorro por porcentaje del PIB en Colombia hoy en día está alrededor de 14,5%, antes de la pandemia estaba en el nivel de 18%, un par de años antes estaba en el nivel de 20%, y esa es la contracara que estamos viendo hoy en día”, explicó López.
Para los representantes del sector privado, la falta de inversión en proyectos de infraestructura y la caída del ahorro nacional son señales de un desequilibrio en la economía que podrían obstaculizar el desarrollo sostenible del país. En este sentido, expresaron la necesidad urgente de no perder las perspectivas de inversión y de asegurar la financiación de proyectos que ya se encuentran en etapas iniciales, con el fin de garantizar su ejecución en el futuro cercano.