La ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, alertó sobre el grave impacto que las intensas lluvias han tenido en varias regiones del país, afectando ya más de 17.000 hectáreas de cultivos. En declaraciones a W Radio, Carvajalino destacó que los suelos colombianos no están preparados para soportar tal cantidad de agua.
Las regiones más afectadas por este fenómeno climático son La Guajira y el Chocó, donde los cultivos de plátano, banano, maíz y fríjol han sufrido graves pérdidas. Además, se han reportado dificultades para la alimentación del ganado debido a las condiciones climáticas extremas. La ministra señaló que estas emergencias afectan directamente la economía campesina y la seguridad alimentaria en el país.
En respuesta a esta crisis, Carvajalino presentó un plan de atención basado en cuatro pilares fundamentales para mitigar el impacto de las lluvias y apoyar a los productores afectados. El primer componente se enfoca en garantizar la alimentación del ganado, para lo cual se han distribuido kits de emergencia con silo para animales. Además, se destinaron $500 millones para esta iniciativa. Le puede interesar: Turquía brindaría ayuda a Colombia ante la crisis climática por lluvias
El segundo pilar del plan busca mejorar la adecuación de los suelos, mediante la distribución de herramientas e insumos que faciliten el drenaje y permitan a los agricultores retomar las actividades productivas.
El tercer componente consiste en promover nuevos ciclos productivos a través de la entrega de semillas certificadas, con el objetivo de reactivar la producción de cultivos esenciales. Para este fin, se han destinado $100 millones en semillas a través de Agrosavia.
Por último, el cuarto eje del plan se centra en coordinar esfuerzos con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para implementar planes de recuperación, fortalecer las cadenas productivas y garantizar la soberanía alimentaria en las regiones más afectadas, con un presupuesto total de $10.000 millones destinados a atender la emergencia en La Guajira y el Chocó. Lea también: Colombia pide ayuda en la COP29 para damnificados por lluvias

La ministra también resaltó la importancia de no descuidar otras zonas del país que enfrentan problemas climáticos, como Santander, que ha sufrido los efectos de las lluvias, y las regiones de la Amazonía y la Orinoquía, donde las sequías han exacerbado la situación. Además, se ha implementado un sistema de líneas especiales de crédito para los productores afectados, con el fin de brindarles apoyo financiero en este momento crítico.
Este plan de atención se presenta como un esfuerzo integral para mitigar los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad alimentaria en el país, priorizando a las regiones más vulnerables ante las emergencias climáticas.