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Colombia

Narco, el perro de Rodolfo Hernández, murió horas después que su amo

Las causas de la muerte de la mascota del excandidato presidencial y exalcalde de Bucaramanga aún son desconocidas.

Narco, el perro de Rodolfo Hernández, murió horas después que su amo

Rodolfo Hernández y su perro 'Narco José'. // Foto: IG @ingrodolfohernandez.

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En las últimas horas, la ciudad de Bucaramanga ha sido escenario de una doble despedida. Rodolfo Hernández Suárez, exalcalde de Bucaramanga y excandidato presidencial, falleció a los 79 años en el Hospital Internacional de Colombia (HIC) de Pidecuesta, Santander, tras enfrentar complicaciones derivadas de un cáncer de colon diagnosticado en 2023. Apenas horas después de su muerte, su mascota, un perro conocido como ‘Narco José', también falleció, lo que ha conmocionado a familiares y seguidores del político.

El deceso de Hernández Suárez ocurrió el pasado lunes a la 1:00 de la tarde, tras permanecer varios días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del HIC. Su condición se agravó luego de una intervención quirúrgica a la que fue sometido a finales de julio. Pese a los esfuerzos médicos, su salud no mejoró, y finalmente, el líder de la Liga de Gobernantes Anticorrupción perdió la batalla contra el cáncer que lo aquejaba. Lea: El día que Rodolfo Hernández golpeó a un concejal en Bucaramanga

El fallecimiento de su perro, ‘Narco José', se confirmó poco después del deceso de Hernández. La familia, a través de redes sociales, compartió la noticia con un emotivo mensaje: “Se fue ‘Narco’ a cuidar a mi papá”. El vínculo entre el exalcalde y su mascota era conocido por sus cercanos, quienes describían a ‘Narco’ como un compañero fiel que estuvo con Hernández durante los momentos más difíciles de su vida.

En una publicación, la revista Semana señaló que ‘Narco José' falleció sobre las 9 de la mañana de hoy martes 3 de septiembre en Bucaramanga, en el apartamento donde residía su dueño, el ingeniero Rodolfo Hernández. Se conoció que el perro tenía 14 años y gozaba de buena salud pese a su avanzada edad.

Luego del fallecimiento de Rodolfo Hernández, su mascota, conocida como 'Narco' José, también murió. Foto: Suministrada/VANGUARDIA
Luego del fallecimiento de Rodolfo Hernández, su mascota, conocida como 'Narco' José, también murió. Foto: Suministrada/VANGUARDIA

Sepelio de Rodolfo Hernández

El cuerpo de Rodolfo Hernández fue cremado el mismo lunes en una ceremonia privada en el parque memorial Tierra Santa, ubicado en la vía a Girón. Las cenizas del político reposan en este lugar, que se ha convertido en su destino final. Según fuentes cercanas a la familia, se realizó una eucaristía en horas de la noche, reservada para los familiares más cercanos.

Este miércoles 4 de septiembre, a las 10:00 de la mañana, se llevará a cabo una segunda eucaristía en la Catedral de la Sagrada Familia, en el centro de Bucaramanga. La familia Hernández Oliveros ha extendido la invitación a amigos, seguidores y figuras públicas que deseen rendir homenaje al exalcalde. Se espera una gran asistencia a este evento, dada la popularidad y el cariño que el político suscitaba en la región.

La familia ha expresado su deseo de mantener la intimidad en estos momentos de dolor, por lo que las ceremonias han sido organizadas de manera discreta y respetuosa.

El legado de Rodolfo Hernández es recordado tanto por su labor política como por su lucha personal contra el cáncer. En 2023, cuando aún estaba en carrera para la Gobernación de Santander, le fue diagnosticado el cáncer de colon que lo llevó a apartarse de la vida pública. La Procuraduría General de la Nación había confirmado su inhabilidad para continuar con su aspiración a la administración departamental, lo que marcó el inicio de un período complicado en su vida.

En medio del proceso judicial que enfrentaba por el escándalo de corrupción conocido como Vitalogic, Hernández reveló públicamente su diagnóstico terminal. Durante una audiencia, manifestó: “Tengo cáncer terminal. De todo pensaba, menos terminar procesado por cosas que yo no hice”, dejando ver su angustia no solo por su salud, sino por la batalla legal que libraba.

A pesar de las dificultades, Rodolfo Hernández siempre mantuvo una actitud combativa y optimista, valores que sus seguidores admiraron hasta el final. Su partida deja un vacío en la política regional, pero también un recuerdo imborrable de su carácter tenaz y su compromiso con la lucha anticorrupción.

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