La delegación del gobierno nacional en el proceso de paz con el ELN ha respondido a las preocupaciones de diversos sectores de la sociedad sobre el fin del cese al fuego, programado para concluir el sábado 3 de agosto a medianoche.
En un comunicado firmado por los delegados Vera Grabe e Iván Cepeda, el gobierno expresó su disposición para realizar una reunión extraordinaria con el fin de reactivar la mesa de diálogos, actualmente congelada. Lea: Más de 70 exmilitares aceptarán cargos por crímenes de guerra en Colombia
Propuesta de la delegación gubernamental
Dado el escaso tiempo disponible para renovar el cese al fuego, la delegación gubernamental propuso una “extensión técnica del cese al fuego,” lo que permitiría mantener la suspensión de hostilidades mientras se organiza el encuentro entre las jefaturas de las delegaciones.
Esta extensión técnica significaría prolongar el cese al fuego temporalmente, evitando que las fuerzas militares retomen las acciones contra el ELN mientras se busca un acuerdo para extender oficialmente el cese.

La delegación del gobierno respondió así a las preocupaciones expresadas por Carlos Ruiz Massieu, representante de las Naciones Unidas en Colombia, y Héctor Fabio Henao, delegado para las relaciones Iglesia-Estado, quienes habían manifestado su inquietud sobre el posible fin del cese al fuego. Lea: Gustavo Petro le responde a Cabal por película de jóvenes torturados en Venezuela
En el comunicado, la delegación señaló que esta extensión técnica “facilitaría el avance de los preparativos necesarios para la celebración de la reunión extraordinaria,” permitiendo abordar temas cruciales en el proceso de diálogos y discutir una “renovación más prolongada del cese al fuego.
Posición de José Félix Lafaurie, negociador de paz del gobierno
El presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie, también destacó hace algunos días que los diálogos de paz deben tomarse con seriedad y no pueden ser manipulados por el ELN como una “dinámica de terror”, que impacta negativamente en la percepción pública de la sociedad colombiana. En este contexto, Lafaurie consideró necesario realizar una revisión del cese al fuego y evaluar su posible prórroga a corto plazo, dada la reciente ola de violencia.