Un informe revelado por la Defensoría del Pueblo da cuenta como habitantes de 148 municipios se encuentran en alto riesgo para la salud, debido al consumo de agua con inviabilidad sanitaria.
El hallazgo, basado en el promedio anual del Índice de Riesgo de la Calidad del Agua para Consumo Humano, evidencia que también que en cerca de 760 pueblos los entes competentes no evaluaron la calidad del recurso hídrico.
“Es decir, unas 534.000 personas ubicadas en los cascos urbanos y alrededor de 799.000 que habitan en sus zonas rurales estuvieron expuestas a una serie de vulneraciones de sus derechos fundamentales”, aseguró el defensor del Pueblo, Carlos Camargo. Lea aquí: Informe revela alza en mortalidad laboral en Colombia durante el 2023
Los casos más graves fueron registrados en Zaragoza (Antioquia), Puerto Asís (Putumayo) y los municipios de Ricaurte, Olaya Herrera, El Peñol y Samaniego (Nariño).
Durante el mismo año 2023 y basados igualmente en el Índice de Riesgo de la Calidad del Agua para Consumo Humano (Irca), desde la Defensoría aseguraron que las autoridades sanitarias no evaluaron la calidad del recurso hídrico en 758 municipios: 693 en jurisdicciones rurales, cinco en cascos urbanos y 60 en cabeceras municipales y sus ruralidades.
Además de la preocupante calidad del agua, otro de los inconvenientes del líquido en Colombia pasa con la poca disponibilidad que se tiene en algunos territorios donde la oferta de agua no satisface la demanda por condiciones climáticas.
De acuerdo con el último reporte de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), en esta temporada del fenómeno El Niño y con corte al 5 de marzo pasado son 271 los municipios del país que tienen desabastecimiento de agua.
Ante el panorama, el Defensor del Pueblo les hizo un llamado a los entes nacionales, departamentales y locales a asegurar el suministro efectivo y su mínimo vital, atendiendo a los criterios de calidad, disponibilidad y accesibilidad. Le puede interesar: “Es un desastre desde que se fundó”: Petro y la polémica sobre la Ungrd
“Exhortamos a los alcaldes municipales a implementar estrategias para fortalecer los servicios de agua potable a través de medios alternos que la garanticen en situaciones de desabastecimiento. Además, les recomendamos destinar recursos y diseñar programas específicos para mejorar infraestructuras en zonas urbanas y rurales, involucrar a los habitantes en la toma de decisiones, evaluar tecnologías apropiadas para áreas rurales y cumplir con las funciones ambientales establecidas en la legislación”, indicó.
Recalcó que “el acceso al agua no es solamente una necesidad básica, sino un derecho esencial para el desarrollo socioeconómico de las comunidades”.