La Procuraduría General de Colombia solicitó este jueves a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que procese a tres excomandantes de la antigua guerrilla de las FARC como máximos responsables por el crimen de lesa humanidad de esclavitud al que fueron sometidos algunos secuestrados.
“La compra de secuestrados no se trató de eventos esporádicos cometidos por algunos de sus miembros, sino de una dinámica acogida de forma sistemática”, señaló el Ministerio Público en un comunicado en el que agrega que se trató de “una política que se extendió por las estructuras de las FARC”, en concreto “por el Bloque Occidental de la disuelta guerrilla, que además nunca se controló o delimitó”.
Los exjefes guerrilleros a quienes la Procuraduría pide responsabilizar son Édgar López Gómez, alias ‘Pacho Chino’, Juan Carlos Ramírez, alias ‘Sargento Pascuas’ y Héctor Julio Villarraga Cristancho, alias ‘El Grillo’. Lea aquí: Rechazan aparición de panfletos en Arauca y Casanare
La Procuraduría también pidió a la justicia transicional, creada tras el acuerdo de 2016 entre el Gobierno y las FARC, que determine responsabilidad de mando de Villarraga por el crimen de guerra de violación sexual que se cometió de manera concurrente con los crímenes de toma de rehenes y otras graves privaciones de la libertad.
Para el Ministerio Público, el Bloque Occidental fue responsable de al menos 42 secuestros con fines económicos en los que fueron privadas de la libertad 92 personas, incluidos menores de edad, por cuyos rescates solicitaron sumas de “hasta cinco millones de dólares para no entregar a la víctima en pedazos”.
Algunos de estas víctimas de secuestro “también fueron torturadas física y psicológicamente, esclavizadas, abusadas sexualmente y luego asesinadas y sus cuerpos desaparecidos”, agregó la información. Le puede interesar: Exigen al ELN liberación de defensor secuestrado hace más de 20 días
Todos estos crímenes mencionados por la Procuraduría son investigados por la JEP en el macrocaso 1, que estudia los secuestros cometidos por las FARC y por el que ya se imputó a toda la última cúpula dirigente de la guerrilla.