El Presupuesto General de la Nación (PGN) para el año 2024, bajo el Gobierno de Petro, establece dos récords importantes: es el más alto en la historia de Colombia, con un monto de $502.6 billones, pero al mismo tiempo, es altamente cuestionado debido a la incertidumbre sobre cómo se financiarán sus gastos.
La preocupación radica en que algunos expertos advierten que podría romper la Regla Fiscal, un mecanismo diseñado para garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas y que establece límites en el endeudamiento del gobierno. Lea aquí: “Es el presupuesto más alto en la historia para el sector”: Mincultura
De este monto, aproximadamente $302 billones se destinan al funcionamiento del gobierno, $94 billones para el pago de deudas y casi $100 billones para inversión.
Sin embargo, la preocupación radica en que aproximadamente $20 billones del presupuesto total de $502.6 billones no tienen una fuente de financiamiento clara, y en el peor de los casos, este déficit podría llegar a ser de $25 a $35 billones.
Las razones detrás de este déficit incluyen la previsión de que la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) recaudará menos de lo esperado y que la reforma tributaria aprobada en 2022 bajo el gobierno de Petro perdió importantes fuentes de financiamiento.
Uno de los aspectos más preocupantes es que el gobierno está contando con ingresos inciertos, ya que la Dian espera recaudar entre $15 y $16 billones a través de litigios tributarios, pero esto depende del contribuyente y de las decisiones de los tribunales. En caso de litigio, no se garantiza un fallo a favor de la Dian, lo que significa que es probable que haya más gastos en 2024 pero menos ingresos de lo proyectado. Lea también: Congreso aprueba Presupuesto General de la Nación para 2024: así quedó
El director del Departamento Nacional de Planeación (DNP) ha señalado que el nivel de deuda pública en Colombia ya está en el 60% del Producto Interno Bruto (PIB), y la Regla Fiscal establece que se debe mantener entre el 55% y el 71%. Esto hace que el déficit presupuestario para 2024 y los años posteriores sean motivo de preocupación.
Además, la falta de claridad en torno a ciertos aspectos de la reforma tributaria, como la deducibilidad de las regalías para las empresas que extraen recursos naturales, podría aumentar el déficit presupuestario a $25 o $35 billones. Flexibilizar la Regla Fiscal es una opción, pero esto podría verse agravado por la desaceleración económica y tensiones globales que aumentarían el costo de endeudarse.