El presidente Gustavo Petro ha intensificado su postura crítica sobre el conflicto entre Israel y Palestina, acusando al Estado de Israel de llevar a cabo una “barbarie” en su trato con el pueblo palestino, que considera superior a las acciones de Hamás contra la población civil israelí.
El mandatario colombiano ha expresado su indignación por el bombardeo del hospital Bautista en Gaza, que resultó en la muerte de cientos de mujeres, niños y personal médico. En sus palabras, “la barbarie del Estado de Israel contra el pueblo palestino ha sobrepasado en mucho la barbarie de Hamás contra la población civil israelí”. Lea aquí: Políticos y diplomáticos piden a Petro rechazar ataques terroristas de Hamás
En respuesta a las críticas y acusaciones de antisemitismo por parte de algunos sectores, Petro aclaró que su crítica se dirige al Estado de Israel por su ocupación ilegal del territorio palestino y no a la religión o la etnia judía. Subrayó el respeto por la cultura, la religión y el derecho del pueblo judío a tener su propio estado. En cambio, lo que se observa es una persecución decidida de todo el pueblo palestino, que se ha llegado a describir como un genocidio.
El presidente Petro enfatizó que es hora de buscar una solución al conflicto en lugar de comparar las atrocidades cometidas por ambas partes. Abogó por abrir el camino hacia la paz y respaldar la opción respaldada por las Naciones Unidas desde 1967: dos estados independientes, el Estado de Israel y el Estado palestino, en sus territorios soberanos.
Con relación al reciente ataque al hospital de Gaza, Petro llamó a la comunidad internacional a condenarlo como un crimen de guerra y abogó por la imposición de la paz y la restauración del derecho del pueblo palestino a la libertad. El ataque al hospital ha generado una fuerte indignación a nivel mundial y desencadenado protestas en varios países de la región. Lea también: Embajador de Colombia en EE.UU. defendió a Petro por tema Israel-Palestina
El conflicto en Medio Oriente sigue siendo un tema de preocupación global, y la postura de Petro refleja una creciente polarización en la opinión pública sobre el conflicto Israel-Palestina. Las llamadas a la paz y la resolución del conflicto son cada vez más urgentes.