Las siete personas permanecían sin encontrarse desde 1988, cuando en el municipio de Uribe las Fuerzas Militares realizaron una incursión con el fin de hacerle frente a la presencia de miembros de las entonces Farc.
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Más de treinta años después, las familias y organizaciones afectadas volvieron al sector y, gracias al trabajo de la UBPD, pudieron encontrar los restos de sus seres queridos. “Encontrar no es fácil, menos cuando confluyen factores tan potentes como el cambio del paisaje y el transcurso del tiempo”, expresó Sonia Pinzón, representante de la corporación Reiniciar.
En la búsqueda aportaron verdad varios excombatientes firmantes del Acuerdo de Paz que habitan en la Nueva Área de Reincorporación Juan de Jesús Monroy, quienes también realizaron actos de memoria junto a las personas y organizaciones buscadoras.
“Es una mezcla de sentimientos encontrados. Después de tanto tiempo podemos hacer esta labor de llegar al territorio, pero también es un poco triste cuando sabemos que se tuvo que esperar tantos años para que se dieran cuenta que había que frenar esta situación de violencia y que sus familias en algún momento pudieran participar, buscar y tratar de mitigar ese dolor que causa la desaparición”, apuntó la coordinadora de Reencuentros en el Meta, Yaritza Paniagua.
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Los cuerpos de las personas recuperadas fueron puestos a disposición de Medicina Legal, pues se realizará su identificación plena para que luego puedan entregarse a sus seres queridos.