“No es nuestro propósito polemizar, pero debemos rechazar cualquier señalamiento de despojo o desplazamiento en el que no hemos incurrido”. En estos términos, el Grupo Argos respondió este jueves a las acusaciones del presidente Gustavo Petro, quien señaló al conglomerado empresarial de ser supuestamente responsable de despojar tierras a campesinos en zonas golpeadas por la violencia.
En una dura arremetida en la noche del miércoles, el Jefe de Estado –quien participó en la entrega de tierras a víctimas del conflicto en la región de El Salado–, aseguró que el grupo empresarial compró terrenos en Montes de María, a través de una empresa llamada Tekia, que supuestamente eran de personas víctimas de desplazamiento forzado a manos de grupos armados. Lea aquí: Lista la convocatoria de Colombia para las eliminatorias
“Estas tierras fueron ocupadas por un gran capital que se denomina Argos, se quedó con la tierra de los desplazados. No voy a acusarlos de la masacre, no sabemos de eso, pero se quedó beneficiaría del fruto de la masacre y de la sangre. Se quedó con las tierras de los campesinos”, declaró Petro.
En respuesta, a través de una carta firmada por su presidente, Jorge Mario Velásquez, el Grupo Argos rechazó los señalamientos y si bien explicó que su intención al contestar lo dicho por Petro “no es polemizar”, ratificó que no es responsable de despojo o desplazamiento. Lea aquí: Hallan cuerpo de estudiante de Enfermería que se ahogó en el Río Magdalena
En su misiva, Argos advirtió la importancia “del respeto por la institucionalidad y de la construcción armoniosa y sin estigmatización entre el Estado y el empresariado”. Sin embargo, detalló que a partir de 2008 resolvió invertir en los municipios de El Carmen de Bolívar y Ovejas tras una invitación pública del Estado “que incentivó la acción del sector privado para promover condiciones de desarrollo a través de la inversión en esa región del país”.
Inclusive, al insistir que no tuvo ninguna injerencia ni participó en las ventas iniciales, Argos explicó que, ante los reclamos, resolvió transformar el proyecto ambiental en uno social.