Dentro de las 12 firmas que compraron los derechos para participar en la nueva licitación por Hidroituango aterrizó una nueva multinacional china que arrastra polémicas y cuestionamientos en varios países de América Latina. Lea aquí: Se presentó ante la justicia hombre que habría asesinado a otro por un cilantro
Se trata de la filial China Gezhouba Group Co. Ltd., uno de los pesos pesados del gigante asiático en el sector de la construcción que viene pisando con fuerza en la región durante los últimos años.
En países como Ecuador y Argentina ha sido cuestionada por megaproyectos y problemas ambientales. Los líos van desde una hidroeléctrica en Ecuador con presuntas fallas y retrasos, una obra de mitigación de inundaciones en ese mismo país con múltiples quejas de la población local, una hidroeléctrica en Argentina investigada por problemas en sus estudios ambientales y hasta una sanción del Banco Mundial en 2015 contra varias de sus filiales, por falencias en su gestión ambiental.
Dentro de las 12 firmas que compraron los derechos para participar en la nueva licitación por Hidroituango aterrizó una nueva multinacional china que arrastra polémicas y cuestionamientos en varios países de América Latina.
Se trata de la filial China Gezhouba Group Co. Ltd., uno de los pesos pesados del gigante asiático en el sector de la construcción que viene pisando con fuerza en la región durante los últimos años. Lea aquí: Así se puede postular al nuevo subsidio del gobierno ‘Cambia Mi Casa’
En países como Ecuador y Argentina ha sido cuestionada por megaproyectos y problemas ambientales. Los líos van desde una hidroeléctrica en Ecuador con presuntas fallas y retrasos, una obra de mitigación de inundaciones en ese mismo país con múltiples quejas de la población local, una hidroeléctrica en Argentina investigada por problemas en sus estudios ambientales y hasta una sanción del Banco Mundial en 2015 contra varias de sus filiales, por falencias en su gestión ambiental.
En medio de esos reclamos, registró ese mismo medio, la Contraloría de ese país abrió una investigación en la que documentó presuntas “inconsistencias técnicas en precios y pagos”, que se sumaron a investigaciones sobre otras obras de mitigación de inundaciones, identificadas como Cañar y Naranjal.
Durante el desarrollo de esa obra, otra de las polémicas que salió a flote y fue registrada por la prensa fue una sanción que impuso el Banco Mundial en contra de al menos cuatro filiales de Gezhouba Group por “mala conducta” en “tres proyectos financiados por el Banco en la República Popular de China en relación con la conservación del agua, la recuperación de terremotos y la gestión de inundaciones”, tal como lo informó ese organismo multilateral el 29 de mayo de 2015.
Los cuestionamientos ambientales también aparecen para esa empresa en Argentina, en donde fue escogida para el proyecto La Barrancosa -Cóndor Cliff (en un consorcio integrado también por las firmas Electroingeniería S.A. e Hidrocuyo S.A.), que fue suspendido por la Corte Suprema de ese país durante dos años para revisar los estudios de impacto ambiental.
Aunque las obras se reactivaron en marzo de 2018, en mayo de 2021 el Instituto Nacional de Prevención Sísmica alertó en unos estudios que el proyecto habría omitido fallas geológicas en sus estudios de peligrosidad sísmica, tal como lo informó entonces el diario La Nación.
Junto a las otras dos firmas chinas que ya pujaron por la megaobra el año pasado, Yellow River y Powerchina, a mediados de este año se conocerá si China Gezhouba Group Co es una de las empresas que decide entregar una oferta formal por Hidroituango en junio próximo, según el cronograma que maneja por ahora EPM.