¿Creías que en tu familia había demasiados problemas? Esta historia podría hacerte cambiar de opinión. El drama que atraviesa la familia Trespalacios en estos momentos parece sacado de una telenovela. ¡Y todo por plata! Todo es producto de la pérdida de $120 millones, los cuales Miller Trespalacios asegura que, presuntamente, le robaron su madre y su hermana mientras él trabajaba en Canadá.
La historia se ha regado como pólvora a nivel nacional, causando reacciones hasta en Twitter, donde se hizo pública el acta de defunción que presuntamente sus parientes usaron para fingir su muerte y retirar el dinero en el banco. Por su parte, las mujeres dicen estar cansadas de todo el drama familiar a raíz de las mentiras de Miller, pues aseveran que él mismo se gastó el dinero.
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¿Qué pasó con esa plata?, ¿quién la tiene?, ¿a dónde va a parar este problema? Miembros de esta familia hablan para El Universal y dan sus posiciones.
Un desagradable regreso
Miller regresó a Colombia en 2019, justo antes de la pandemia. Tenía pensado disponer de su dinero, pero asegura que se llevó la sorpresa de no tener fondos en su CDT, por lo que abrió una investigación en Bancolombia.
“Demoraron meses en darme respuesta sobre lo que había pasado con mi plata. Yo denuncié y mi caso fue archivado. Me vine para Barranquilla y aquí estoy sin un peso, lo poco que tenía lo perdí en un atraco, estoy pasando hambre”, contó Miller a El Universal.
El barranquillero asegura que su familia lo ha perjudicado. Sus parientes no lo criaron y lo conocieron cuando ya era un hombre que ganaba dinero por sus propios medios.
“Ellas presentaron un falso poder, me hicieron pasar por muerto con un registro de defunción falso y retiraron el dinero por mi. Compraron moto, apartamento y hasta una casa finca en Caucasia, Antioquia. Mi mamá y mi hermana cogieron esa plata y la tienen repartida, prestan hasta con pagadiarios”, aseveró.
Este es uno de los tantos correos que Miller ha enviado.
La otra cara de la moneda
El Universal contactó a las mujeres, quienes actualmente residen en Caucasia, Antioquia. Una de las hermanas dio sus declaraciones y aseguró que “las cosas no son como Miller las está contando”.
La mujer relata que durante la estancia de Miller en Canadá la relación era muy cordial. Nunca hubo problemas o diferencias entre ellos. Dice que la controversia y el drama se desató en su casa cuando su hermano regresó al país a reclamarles un dinero que ellas no tienen.
“Soy una mujer trabajadora, lo que le compro a mis hijas es porque trabajo, no tengo nada ajeno. Miller pasó de ser un familiar a convertirse en un dolor de cabeza. Este problema tiene a mi mamá enferma, cada día sale un show nuevo, producto de su imaginación y parece una guerra de nunca acabar, porque hasta nos ha amenazado de muerte si no le damos su supuesta plata”, aseguró.
La familiar de Miller asegura que ese dinero fue recibido por él, y que hasta lo gastó. “El caso fue archivado por falta de pruebas, todo lo que él asegura no tiene soporte. Él, incluso, invirtió $70 millones en un apartamento en Barranquilla. Nosotras no tenemos miedo porque nos han investigado en la Fiscalía y no nos han encontrado nada. Si yo tuviese esa plata estuviera bien económicamente; yo pago arriendo y de cosa tengo una moto. Tengo dos niñas a las que alimentar”, indicó la familiar.
Hasta el momento Miller no ha obtenido noticias positivas sobre su dinero. Pese a la denuncia interpuesta ante la Fiscalía y la Superintendencia Financiera, poco o nada se ha hecho para que los $120 millones puedan volver a sus cuentas. En estos momentos se encuentra buscando empleo en Barranquilla y pide ayuda a quienes deseen tenderle la mano.